Los grupos municipales del BNG y EU exigieron ayer al Gobierno Local la revisión de la concesión del servicio de transporte urbano colectivo a causa de los beneficios obtenidos el año pasado por la Compañía de Tranvías, que llegaron a los 4,6 millones de euros, mientras que el Ayuntamiento subvencionó su actividad con 8 millones de euros. Los resultados de la empresa, desvelados este lunes por LA OPINIÓN, se incrementaron de forma notable este año gracias a la sentencia a su favor en un pleito que mantenía con Hacienda que le proporcionó unos dos millones de euros.

La concejal del BNG Avia Veira destacó ayer que la subvención municipal al transporte público supuso el 36,6% de la cifra de negocio de la empresa, por lo que calificó la concesión de "desastre" para el Ayuntamiento. Para la edil nacionalista, Negreira "es el mayor cómplice del atraco a mano armada de la concesión de la Compañía de Tranvías", lo que justificó porque la administración municipal recibió del Estado el año pasado 1,4 millones de euros como subvención al transporte, mientras que destinó más de 8 millones en ayudas para el bonobús que recibió la empresa, cuyo déficit de explotación subvencionable fue sin embargo de 3,7 millones de euros.

Según la concejal, la propia compañía reconoce en sus cuentas que la subvención municipal y el aumento de las tarifas son los factores que le permitieron incrementar su cifra de negocios en 2012, que llegó a los 21,9 millones. Veira definió esta situación como un "saqueo directo a los bolsillos del pueblo" del que culpó al alcalde por rechazar la revisión de la fórmula polinómica de cálculo de las tarifas, a la que tildó de "perversa". La edil coincidió con el Gobierno local en que la rescisión del contrato con la Compañía de Tranvías es imposible por la cuantiosa indemnización que habría que abonarle, pero explicó que sí es posible su revisión, como figura en el reglamento municipal de transporte.

"Cuando hay personas que se ven obligadas a revolver en los contenedores para comer, parece indecente alcanzar cerca de cinco millones de euros de beneficios en 2012 por desarrollar un servicio público", declaró el portavoz de Esquerda Unida, César Santiso, que además calificó de "caro" y "de baja calidad" el trabajo desarrollado por la empresa. La coalición izquierdista planteó que se alcance un pacto entre todos los grupos políticos de la Corporación con el fin de alcanzar una "posición común" que permita al Gobierno Local abrir una negociación con la Compañía de Tranvías para revisar la concesión con el fin de reducir su coste y las tarifas que se aplican a los usuarios.

Esquerda Unida defiende la puesta en marcha en A Coruña de un billete único progresivo para el transporte público, mediante el que los viajeros pagarían la tarifa en el primer trayecto del día, cuyo coste variaría según los ingresos de la familia, mientras que en los transbordos sólo abonarían el 10% de la tarifa inicial.