La carretera AC-14, conocida popularmente como la tercera ronda, verá incrementada su dotación para el próximo año, según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado, que consigna 17,4 millones de euros para 2014 frente a los 13,2 que se preveían en las cuentas de este año. La cruz en este campo de actuaciones viene dada por la ampliación de la avenida de Alfonso Molina, ya que únicamente se incluyen en el presupuesto 10.000 euros, lo que implica que las obras no comenzarán durante el próximo ejercicio.

A pesar del aumento de recursos para la tercera ronda, la programación establecida por Fomento para esta actuación arroja dudas, ya que en los presupuestos de este año figura que se invertirán 25,8 millones y que en 2014 serían 13,2 millones, mientras que en 2015 se completaría el proyecto con 22,1 millones. Pero en las cifras que aporta ahora el ministerio se produce una discordancia, puesto que aunque el próximo año se pasa a 17,4 millones, en 2015 solo serán 3,6 millones los previstos, cantidad que aparece también reflejada para 2016, aunque el Gobierno mantiene su previsión de que la carretera entrará en servicio en la primavera de 2015, justo antes de las próximas elecciones municipales.

El alto ritmo de ejecución de los trabajos en el tramo entre As Rañas y A Zapateira, el último que queda por construir, hace sospechar que Fomento será capaz de concluir el proyecto en el plazo previsto, por lo que la cantidad consignada para 2016 podría tratarse del pago de certificaciones de obra que se retrasen hasta esa fecha. El grupo municipal del BNG interpreta no obstante esta programación como que la vía no estará concluida hasta dentro de tres años, por lo que afirma que va camino "de convertirse en la obra de El Escorial" .

El Gobierno local verá frustrada sin embargo su intención de que se ponga en marcha uno de los proyectos que más ha utilizado para publicitar la voluntad inversora de Madrid en la ciudad: la ampliación de la avenida de Alfonso Molina. Fomento hizo público el pasado mes de marzo el diseño de esta actuación, presupuestada en 7,6 millones de euros, y se informó de que los trabajos comenzarían en 2014, aunque los presupuestos solo contienen una exigua partida de 5.000 euros con la que es imposible iniciar las obras.

La remodelación de la avenida iba a ser aprovechada además para dar respuesta a los vecinos de Pedralonga y Palavea con la instalación de una pasarela peatonal entre ambos barrios. Este proyecto figura en las cuentas estatales de 2013 con una dotación de 5.000 euros y ahora desaparece de las previsiones del Gobierno, por lo que las pretensiones vecinales se esfuman por el momento.

Otra de las actuaciones que se desvanecen con este proyecto presupuestario es la ampliación de la autopista AP-9 en su zona más próxima a A Coruña para resolver el problema de los accesos a la ciudad. Si este año figura en los documentos una inversión de 5.000 euros, en los del próximo ejercicio no aparece ni siquiera un euro, por lo que esta iniciativa se aplaza hasta una fecha por ahora desconocida.