No es fácil lanzarse al ruedo del cómic en Galicia, y menos en medio del vendaval de crisis. Sin embargo, Marcos B lo ha intentado. Amante del género de toda la vida, este profesor de Secundaria de 36 años lleva desde 1999 haciendo sus pinitos en certámenes de historias cortas. Ahora ha dado un paso más y acaba de publicar El Caserón del Acantilado, el que pretende ser el primer número de la serie Las aventuras de M&M.

La experiencia ha sido iniciática en todos los sentidos. No ha contado con apoyo de ninguna editorial y la única financiación recibida ha sido la de su propia cartera. "Pensé en la opción del crowdfunding pero ya llevaba tiempo haciendo el cómic y no tenía mucha posibilidad de ofrecer merchandising a mis mecenas", asegura.

Al repasar estos casi tres años de trabajo creativo, Marcos B echa en falta un mayor compromiso del mundo editorial con los autores jóvenes. "Es muy difícil que hoy las editoriales den oportunidad a nuevas firmas. Tal y como está la cosa se arriesga poco y, si se hace, es con algo ya conocido", lamenta.

Todo el proceso legal para publicar su primer número lo hizo buscando a través de internet, y fue en este medio donde encontró también la imprenta online a la que ha encargado la impresión de los primeros cien ejemplares. Un proceso de búsqueda y documentación en solitario que se prolongó durante un año y a lo largo del cual llamó a muchas puertas editoriales sin éxito.

Las aventuras de M&M tienen algo de autobiográfico. Cuentan la historia de Marcos y Marta, una pareja inspirada en una relación que el propio Marcos B tuvo en el pasado. "Fue mi novia de aquel entonces la que me dio la idea de lanzar el cómic sobre una pareja". Dirigido a un público juvenil, de entre 6 y 15 años, mezcla humor con misterio ambientándose en un pueblo marinero. En esta entrega, la pareja decide tomarse unos días de descanso en los que traban amistad con una joven que acaba de recibir en herencia un extraño caserón. "A partir de ahí comienzan a sucederse desapariciones misteriosas y van ocurriendo cosas de lo más raras", explica Marcos B.

La historia también aparece impregnada con otra de las inquietudes de Marcos: la naturaleza. Biólogo de formación, muchos de los escenarios del cómic cuentan con detalles vinculados al mundo animal. El Caserón del Acantilado es, de hecho, el fruto de dos años de trabajo en los que Marcos B compaginó su trabajo como profesor de instituto con su vertiente más creativa.

Los pormenores de este proyecto pueden encontrarse en el espacio web que ha habilitado para dar a conocer sus personajes y también algo más de él como autor de cómic (www.lasaventurasdemm.blogspot.com.es).

Ahora espera conocer la acogida del cómic para decidir imprimir más o menos números en el futuro. "En las librerías que fui dejando mi cómic para que se vendiese parece que va yendo bien", asegura, esperanzado en, al menos, poder recuperar la inversión realizada.