La marchante de arte Teresa Díaz, viuda del dramaturgo Francisco Taxes, falleció en la noche del viernes y será enterrada hoy en el cementerio de San Amaro. Persona de gran inventiva, tenacidad y energía, Díaz mantuvo una directa relación con los movimientos de renovación cultural y artística de la Transición, principalmente A Carón y A Galga. Colaboradora de las primeras piezas del cine gallego, su actividad principal se desarrolló en torno al arte y sus transacciones, en la que desarrolló un intenso trabajo. Trabajó mano a mano con autores como Laxeiro, Abelenda y Díaz Pardo y con otros de su generación como Corredoira, Cabanas y Lamazares. Fue la gestora de la operación de venta a la obra social de la antigua Caixa Galicia de la colección de Urbano Lugrís.