El Ministerio de Defensa continúa sin tener fijada una fecha para sacar a concurso la gestión de la fábrica de armas de A Coruña, pese a la presión de los trabajadores por acelerar el proceso. Según informaron esta semana fuentes del Gobierno central a este diario, "no hay ningún plazo fijado para sacar a concurso la factoría". Estas mismas fuentes también se negaron a informar sobre el posible interés de nuevos grupos inversores. "No se conocerán las empresas interesadas hasta que no se publique el concurso", manifestaron.

Pese a que, en un inicio, la licitación se tendría que haber hecho pública en diciembre del pasado año, el Gobierno central reconoció a finales de 2013 que se veía obligado a posponer la convocatoria ante los "retrasos" en el proceso de retrocesión de General Dynamics, es decir, su desvinculación de la factoría y la devolución a su dueño, el Ministerio de Defensa. Y es que para el Gobierno central no es posible sacar a concurso las instalaciones sin saber cuál va a ser el estado de las mismas al finalizar la fase de salida de la empresa norteamericana.

El antiguo presidente del comité de empresa, Roberto Teijido, manifestó en las últimas semanas a representantes de la multinacional americana y del Gobierno central su interés en que el concurso se hiciese público a pesar de que el proceso de retrocesión no se hubiese finalizado. "En Palencia se hicieron las dos cosas en paralelo, así que no sé por que no puede hacerse igual en el caso de A Coruña", manifestó el representante de los trabajadores.

Teijido, con todo, reconoce que están comprobando que el proceso de retrocesión "avanza día a día" y que, incluso, Defensa ha obligado a General Dynamics a acometer algunas actuaciones antes de su marcha que no estaban previstas con anterioridad. "Nosotros pedimos que sea ahora pero confiamos en que, aunque sea algo más tarde, se acabe convocando. De lo contrario, estaríamos ante un gran escándalo de proporciones mayúsculas", manifestó Teijido.

Con respecto a las empresas interesadas en reactivar la actividad del complejo, la situación es la misma que hace un mes. Solo el grupo gallego IFFE y el de empresas gallego navarras Hércules de Armamento han manifestado interés por la fábrica, apostando ambos por la diversificación de la producción en las naves de Pedralonga hacia sectores como el aeronáutico o eléctrico.

De estos dos proyectos, solo el de IFFE solicitaba apoyo financiero de la Xunta, a través del Instituto Galego de Promoción Económica, mientras que Hércules de Armamento presumía de no necesitar ni un euro de la Administración.

La decisión de convocar un concurso público para asignar el futuro gestor de la fábrica de armas se hizo pública a finales de 2013, después de casi medio año de encierros y duras protestas por parte de los casi 70 trabajadores que decidieron no aceptar los despidos voluntarios ofrecidos por la empresa.

Pocos han sido los avances de Defensa en relación con la fábrica de armas en las últimas semanas. Solo el diciembre pasado, y en respuesta a una pregunta registrada por el senador y exalcalde Javier Losada, manifestó que su función en el futuro proyecto se limitará "a controlar la fabricación del material exclusivo de defensa".