Los dos pretendientes de la fábrica de armas han pasado el primer filtro de Defensa. La mesa de adjudicación concesional resolvió ayer, con tres días de retraso, que la documentación presentada por el grupo IFFE y por Hércules de Armamento es "correcta" y que por lo tanto pueden continuar su pelea por convertirse en el futuro gestor del complejo industrial de Pedralonga.

A partir de hoy, ambos proyectos cuentan con un plazo de diez días para visitar las históricas instalaciones. Una vez se acabe este periodo, el Ministerio les otorgará un margen de 30 días para presentar la oferta técnica y económica de cada uno de los proyectos. De este modo, el 4 de julio será la fecha tope para que el Ministerio cuente con los informes detallados de cada una de las empresas.

Ambas firmas apuestan por convertir la factoría en un centro de innovación en el que la producción de material para la industria armamentística se combine con la fabricación para la industria civil. Hasta el momento, solo Hércules de Armamento ha desvelado el nombre de su propuesta de director. Será Ramón Mejuto, el que ya fue último director de la factoría coruñesa en la etapa final de General Dynamics. El grupo IFFE desvelará más detalles de su propuesta en los próximos días.

A la hora de adjudicar un nuevo gestor, el Ministerio valorará a las empresas que contraten a un mayor número de trabajadores, hasta un máximo de 150, con contrato indefinido y durante el primer año de actividad.

Al margen de esto, el resto de puntos que se otorguen a cada proyecto se repartirán entre el plan de negocio que presente cada compañía y la oferta económica que hagan al Ministerio. Defensa exige como mínimo el abono de un canon anual de 200.000 euros.