Dice el dibujante y director del Salón del Cómic, Miguelanxo Prado, que, en las primeras ediciones del festival invitaban a las ilustradoras en activo porque eran la excepción. El cómic era, hasta no hace tantos años, un mundo en el que dominaban las manos de los hombres. En esta edición previa a la mayoría de edad, Viñetas desde o Atlántico se abre a las ilustradoras. "No las invitamos por ser mujeres sino porque se lo merecen por sus trabajos, porque son buenas", explicó ayer Prado que asegura que, junto a las creadoras han llegado también al cómic nuevas temáticas y lectoras.

Durante esta semana, los más pequeños tendrán la oportunidad de descifrar ese mundo de la ilustración en clave femenina y de la mano de creadoras gallegas -algunas de ellas coruñesas-. "Siete autoras, 56 talleres en siete días para unos doscientos niños", definió ayer las actividades programadas para el público infantil el dibujante y coordinador de los talleres de Viñetas, Manel Cráneo. Todas se agrupan bajo el título Autoras sobre el papel y se celebrarán en el Ágora y en el Fórum Metropolitano.

Por primera vez, estas actividades le harán un hueco al universo del cómic manga, que tanto ha enganchado a pequeños y mayores, y también enseñará a los participantes, entre otras cosas, la importancia de la luz y las sombras a la hora de dibujar y de plasmar una escena realista sobre el papel.

Viñetas desde o Atlántico llega su edición número 17 con experiencias también para los mayores y es que, además de charlas, clases magistrales y exposiciones hay venta de publicaciones y una caseta, en los jardines de Méndez Núñez en la que dos maquilladoras convertirán a quienes lo deseen en zombies.

Es un guiño a uno de los autores invitados, Charlie Adlard, el creador de The walking dead, The walking deaduna serie que saltó del papel a la pequeña pantalla y que supone, según puntualizó Prado, esa situación atípica en un mundo que, como todos, también se ha visto afectado por la crisis.

"El que antes compraba dos o tres títulos al mes ahora se lleva uno y, a veces, uno cada dos meses", relató Prado, que, en el acto inaugural del festival, aseguró que el mundo de la banda diseñada está pasando también por una etapa de cambios, alejándose del papel y pasándose a la pantalla.

El alcalde, Carlos Negreira, puso el énfasis en la creatividad que nace en unos tiempos de crisis como el actual. "Es cuando nos aprietan cuando damos lo mejor de nosotros mismos", dijo el regidor municipal, contestando al discurso de Miguelanxo Prado en el que había advertido ya de que no todos los creadores ni las editoriales y sus proyectos habían conseguido seguir adelante y de que algunos se habían "quedado en el camino".

De las paredes del Kiosco Alfonso, de las salas de exposiciones de Palexco y del palacio municipal de María Pita y de la de Salvador de Madariaga cuelgan originales de Oriol Hernández y Sento, de Montse Martín y de los primeros pasos del cómic español en los años 50.

Se pueden ver las líneas corregidas, los papeles cortados que, en una viñeta, tapan un diálogo que no era lo suficientemente bueno o que no iba en esa página sino en otra y las líneas de corrector blanco, que ocultan una manchita, un trazo torcido o un simple despiste. Son los papeles de los que nacen las historias que después acaban en las manos de los lectores, los primeros latidos hechos de tinta.