La Policía Nacional arrestó el pasado jueves, día 28 de agosto, a un vecino de la ciudad por cultivar más de 140 plantas de marihuana en un piso situado en la calle Puerto Rico, en el barrio de A Sardiñeira. El acusado utilizaba la vivienda exclusivamente para plantar la droga y, después, distribuirla. El dispositivo de riego automático que estableció, así como la ventilación de la plantación, se podían observar desde la vía pública, según informó el 091. Los propios vecinos del inmueble denunciaron los hechos debido a que el olor de las plantas de marihuana se percibía en algunas viviendas y zonas comunes del edificio.

Los afectados, tras poner los hechos en conocimiento de la policía, descubrieron que el sospechoso también se apropiaba de la luz de la comunidad, ya que había manipulado la instalación eléctrica en el piso donde mantenía la plantación para engancharla a la toma general del edificio. Los agentes de la Policía Nacional que se trasladaron al lugar de los hechos se incautaron, además de las más de 140 plantas de marihuana, de una pesa de precisión que presuntamente utilizaba el sospechoso para separar la droga para después tasarla y venderla en el mercado ilícito. Los funcionarios, además, localizaron diversa documentación relacionada con el cultivo de la sustancia estupefaciente, así como dinero en efectivo supuestamente procedente de los beneficios que le generaba el tráfico de droga.

El imputado, que era dueño del inmueble destinado en exclusiva a albergar las más de 140 plantas, también escondía en su domicilio un pequeño arsenal de armas, entre las que había un subfusil, una escopeta, tres pistolas, un revólver y una pistola de tiro deportivo. "Había numerosa munición de distintos calibres y un machete", informó la Policía Nacional en un escrito enviado ayer a los medios de comunicación. Los agentes del 091 procedieron a la detención del sospechoso como presunto autor de un delito contra la salud pública en su modalidad de sustancias que no causan grave daño a la salud.

Los funcionarios policiales también comprobarán si el acusado tiene licencia para las pistolas que estaban en su poder porque, de lo contrario, sería acusado de un delito de tenencia ilícita de armas. El sospechoso fue puesto a disposición del juzgado que esta semana ejerce las funciones de guardia y quedó en libertad tras prestar declaración ante el magistrado. El vecino de la ciudad será citado para la celebración de la vista oral.