La madre de la menor discapacitada que fue excluida de un campamento municipal de verano en el centro Ágora, Sonia Hermida, solicitó ayer participar en el próximo pleno municipal para intervenir en una rueda pública de ruegos y preguntas. El objetivo es preguntar por cómo justifica el Concello la expulsión de su hija y por las medidas que tomará en el futuro para que los menores con algún tipo de diversidad funcional no vuelvan a ser discriminados.

El Gobierno local alegó en su día que la menor fue excluida del curso, que giraba en torno a la Música y Tradiciones Gallegas, por ser este "uno de los pocos" que no contaba con profesionales especializados para atender a menores discapacitados. En la solicitud de admisión se alertaba que el curso no contaba con este tipo de especialistas pero en ningún momento se decía que no estuviese permitida la participación de discapacitados.

Hermida hizo ayer la solicitud de participar en María Pita acompañada por el portavoz de Esquerda Unida-Os Verdes, César Santiso. "Es importante que pueda participar y más cuando la ciudadanía lo demanda. Hay un reglamento y en este mandato no se aplicó una sola vez. Una de las promesas de Negreira era atender a los vecinos y dar mayor participación ciudadana, ahora incumple constantemente la Ley de Grandes Ciudades en cuanto a los mínimos de participación ciudadana", señaló el concejal de la formación izquierdista.

Pese a que el portavoz del Gobierno municipal, Julio Flores, aseguró que desde el Concello se le habían ofrecido opciones alternativas para la niña, la madre niega haber recibido ningún tipo de propuesta. Hermida denuncia que desde María Pita le sugirieron "buscar un convenio" con una asociación y también "pasar un monitor de Servicios Sociales", aunque, denuncia, "al final no hicieron nada".

"Ana Fernández (concejal de Cultura) me transmitió el compromiso del alcalde de solucionar esto. Todo el apoyo. Eso fueron sus palabras que no se tradujeron en hechos. No tuve más respuesta", enfatizó la madre.

Desde el Concello sostienen que de 844 campamentos, más de 766 tienen personal específico para atender las necesidades de los discapacitados.