La última parte de la tercera ronda entra en su fase más complicada para el tráfico a partir del próximo martes, por lo que la circulación de vehículos y peatones sufrirá modificaciones durante los próximos "cinco meses", según explicó ayer el concejal de Infraestructuras, Martín Fernández.

El plazo que se marcan el Concello y el Ministerio de Fomento para cerrar estas obras está en "marzo o abril" del próximo año, justo a tiempo para poder inaugurar el tramo, ya que las elecciones municipales serán en mayo y no se pueden hacer presentaciones desde la convocatoria de los comicios.

Los barrios de O Birloque y Elviña, para entonces, estarán conectados y contarán con un paso elevado de 12 metros de ancho por el que pasarán vehículos, peatones y bicicletas a través de una senda especial. Los trabajos se dividen en cuatro fases. Las dos primeras comenzarán la próxima semana y acabarán en cinco semanas.

A partir del martes, no se podrá utilizar el paso directo que une la calle Picasso con la avenida de Glasgow, así que, como alternativa para ir de O Birloque a Elviña y de Elviña a O Birloque habrá que utilizar las rotondas de Lonzas y de las Pajaritas, que serán las encargadas de distribuir el tráfico. Para facilitar la circulación, la glorieta de Lonzas tendrá cedas en todos los accesos. A medida que se vayan ejecutando las obras, se habilitarán otro tipo de soluciones para peatones y vehículos. El martes estará ya en marcha el ramal de incorporación de la calle Picasso hacia la glorieta de Lonzas, así que se podrá acceder a través de él al polígono de A Grela y a Salgado Torres y se eliminará el acceso desde la avenida de San Cristóbal hacia Pablo Picasso. Ese enlace tendrá que hacerse por la fuente de las Pajaritas.

Cuando las obras avancen un poco más -tienen un plazo máximo de ejecución de cinco semanas- se habilitará una pasarela provisional peatonal que unirá la avenida de Glasgow y la calle Pablo Picasso, a partir de entonces, se eliminarán los semáforos de esa unión, para facilitar la circulación del tráfico. La avenida de San Cristóbal pasará de tener dos carriles a solo uno, desde A Grela hacia Matogrande. Las dos siguientes fases tendrán como objetivo acabar el paso inferior de los vehículos y los muros pantalla del enlace de Glasgow y Picasso.

Cuando se acometan las dos últimas fases, se realizarán otros cambios de tráfico, ya que podrán entrar en servicio infraestructuras que, ahora todavía están en construcción. Estas obras requieren una inversión de 3,3 millones de euros aportados por Fomento.