El Ayuntamiento de A Coruña ha ejecutado este mediodía el desalojo forzoso de Isabel y Álvaro Corral, madre e hijo, obligados por la comisión judicial a abandonar su vivienda en Elviña, donde persiste la concentración de unas cien personas que han acudido al lugar con el fin de tratar de parar el derribo de la casa, programado para permitir el avance del polígono de viviendas previsto en el parque ofimático. Las seis personas -familia y activistas- que se habían 'atrincherado' en el interior de la vivienda para ofrecer 'resistencia' al desalojo forzoso ya están fuera de la finca. Los Bomberos de A Coruña se han negado a intervenir junto a la comisión judicial en la ejecución del desalojo forzoso.Bomberos de A Coruñase han negado a intervenirdesalojo forzoso

El abogado de la familia desalojada ha explicado, en nombre de los propietarios de la casa -quienes, visiblemente emocionados, han preferido no hablar con los informadores- que han sido los dueños los que han decidido abandonar por su propio pie la casa cuando la Policía Local ha entrado para requerir que abandonaran la vivienda. Los efectivos antidisturbios de la policía nacional que siguen en Elviña no han llegado a intervenir en el momento del desalojo forzoso. Un camión está retirando de la casa algunos enseres mientras se ultiman los preparativos para el derribo de la edificación principal de la finca.

El amplio despliegue policial se mantiene en las inmediaciones de la vivienda desde primeras horas de la mañana y continúa mientras una pala ha empezado a derribar construcciones auxiliares en el exterior de la casa. Dentro permanecieron hasta pasadas las 13h el propietario de la vivienda y su hijo, además de otras cuatro personas que han querido mostrar su 'resistencia' al desalojo de esta familia, tres de ellas subiéndose al tejado de la vivienda para tratar de paralizar el derriboresistenciadesalojo tratar de paralizar el derribo. Entre los que se han encaramado a la cubierta estaba Roberto Rivas, en su día sancionado por negarse a intervenir como bombero en la ejecución del desahucio de Aurelia Reybombero desahucio de Aurelia Rey.

Una grúa con plataforma llegó a las 12h al lugar, presuntamente para tratar de forzar a las personas que mantenían la 'resistencia' a abandonar el tejado. Alrededor de las 13.20h se ha confirmado que todos han sido desalojados y están ya fuera de la casa.

Decenas de informadores que han acudido a Elviña para seguir el avance de los hechos han sido obligados a abandonar la finca de una vecina del lugar desde donde estaban observando lo que ocurría en la vivienda de Isabel y Álvaro Corral.

GRAN ATASCO

La protesta y el despliegue policial en la zona ha provocado hoy a primera hora atascos en los accesos a A Coruña por Alfonso Molina que se han hecho notar desde A Pasaxe, en sentido entrada, y desde la Ronda de Outeiro, en sentido salida, causando retenciones kilométricas también en los accesos a la ciudad por la autopista AP-9 y en la salida por Avenida de San Cristóbal. Pasadas las 10.30h, la circulación seguía siendo lenta en Alfonso Molina y sus conexiones.

RESISTENCIA

Cuando la comisión judicial se presentó esta mañana, al filo de las 08.45h, en la casa de Isabel y Álvaro, dentro de la vivienda había "unas veinte personas" -según varios testigos- entre las que, además de la familia, se encontraban los ediles del BNG de A Coruña Xosé Manuel Carril y Avia Veira, ésta en el exterior de la casa.

Sobre las 10h, una pala comenzó a 'rondar' la casa y, según testigos, en un momento llegó a golpear la vivienda, lo que generó protestas de las personas concentradas en el exterior, ante lo que cesó por unos instantes el trabajo de la máquina. Hubo forcejeos entre policías y activistas contrarios al desalojo, y según algunas fuentes los agentes llegaron a cargar contra una treintena de activistas. Dos personas resultaron heridas en el forcejeo con la policía, que según diversas fuentes llegó a cargar contra los activistas.

La policía ordenó, entonces, a las personas que estaban en el interior de la vivienda que abandonaran la casa, donde permanecen seis personas, incluidos tres activistas que siguen en el tejado para tratar de parar el derribo si se produjera.

UN DETENIDO

El colectivo de apoyo a la familia sobre la que pesa el inminente desalojo ya se manifestó ayer junto a la casa de Isabel y Álvaro para intentar forzar la paralización de la ejecución de la orden de desalojo o, cuando menos, para pararla hasta rebasar el 1 de diciembre que, según les ha manifestado el Concello a los afectados, es cuando se cumple el plazo para llevar a cabo el proceso. Si no se hace en estos días, el Gobierno local tendría que iniciar de nuevo los trámites para poder derribar.

Uno de los activistas ni siquiera consiguió llegar ayer a la concentración. Según los testigos, uno de los vecinos que, al no haber sido expropiado se convirtió, como Isabel y Álvaro, en promotor del ofimático, fue detenido por la Policía Nacional. "Estaba en el puente de Alfonso Molina, subieron tres agentes, forcejearon y se lo llevaron para Lonzas", contaba ayer el portavoz de Stop Desahucios, Héctor Tejón.