El concejal de Servicios Sociales, Miguel Lorenzo, aseguró ayer que, a pesar de que el año pasado había en A Coruña una media de 35 personas durmiendo en la calleen A Coruña una media de 35 personas durmiendo en la calle, las 60 plazas que tiene el Concello en el albergue de transeúntes no se habían llenado ningún día. Lorenzo atribuyó ayer a la apertura de las nuevas instalaciones de la Fundación Padre RubinosFundación Padre Rubinos el descenso acusado en el número de personas que carecen de hogar y que, cada día, duermen en la calle.

Sobre el caso concreto de un mendigo que reside en la calle San Andrés, Lorenzo aseguró que se ha iniciado "un nuevo protocolo de actuación" debido al "deterioro" de su salud. Y es que, la Administración no puede imponerle que ingrese en una institución aunque considere que su vida sería mejor allí que en la calle. Lorenzo destacó ayer la labor de los voluntarios que, en ocasiones, consiguen que algunas personas dejen la indigencia.