Los votos jóvenes que se lleva la emigración

G. M. O. | a coruña

Son jóvenes y están lejos de casa. Están atentos en mayor o menor medida de la actualidad municipal o política y recogen en su entorno, en el que hay otros jóvenes que han tenido que hacer las maletas, el malestar por la situación del país que los ha visto irse.

Ricard Pujol tiene 27 años y, desde 2013, vive en Estocolmo. Se quedó tras un Erasmus. "En España no hay trabajo para los jóvenes, no se aprecia la cultura tanto como aquí y un mismo trabajo te ofrece menos posibilidades allí que aquí", explica Pujol, que es músico clásico. Admite que, últimamente, no sigue mucho la política coruñesa y eso de que no le dejen votar, no le "sorprende", porque tampoco recibió información de cómo podía hacerlo en las generales. "A los que están en el poder no les interesa un posible voto que pueda castigarlos por sus fallos, principalmente por la corrupción", analiza Pujol, "muchos de los que nos hemos ido nos sentimos avergonzados de la situación política actual y queremos un cambio".

Francisco Romero vive en Roma desde 2013. Asegura que, si pudiese votar en las elecciones de mayo, lo haría en "blanco o nulo" porque la distancia ha hecho que su contacto con la política municipal sea casi nula. "Me entero por lo que pone un amigo en el Facebook y poco más", admite, así que, el hecho de que no le dejen votar tampoco le quita el sueño. "Es que las cosas que me afectan, a nivel municipal, ahora están en Roma", explica.

Más lejos está Iago Crespo, de 32 años. Su marcha no fue forzosa. Su empresa, Genesal, le envió en mayo a crear su filial en el estado mexicano de Guanajuato. "Siempre he ejercido mi derecho al voto cuando estaba en Coruña, por lo que entiendo que como derecho constitucional no se debería limitar por el hecho de estar fuera de tu país", opina."Si hemos llegado a la situación actual de desencanto, desempleo y falta de perspectiva", añade, "es en gran parte por la actitud y las acciones de nuestros políticos. Ellos mismos no se dan cuenta que con cada acción orientada en sus propios intereses, menoscaban los cimientos de nuestra democracia".

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