La sala de lo Social de la Audiencia Nacional dio validez por segunda vez al expediente de regulación de empleo (ERE) en Santa Bárbara Sistemas, mediante el que se despidió a 62 trabajadores de la fábrica de armas de A Coruña, tras la anulación por el Tribunal Supremo del primer fallo al no haber tenido en cuenta los argumentos expresados por los sindicatos. En la nueva sentencia, que es recurrible ante el Supremo, se estima que para aplicar el ERE hubo "causa económica, productiva y organizativa, con pérdidas actuales, contracción de la demanda, subactividad y distribución ineficiente de la plantilla". El tribunal desestima además la excepción de falta de legitimación para ser parte del proceso que habían presentado los sindicatos Comisiones Obreras, UGT y CSI-CSIF.

Santa Bárbara Sistemas inició en febrero de 2013 un procedimiento de despido colectivo en sus centros de A Coruña, Granada, Oviedo, Sevilla y Madrid, en el que no se llegó a un acuerdo con los sindicatos, por lo que procedió a realizar 593 despidos, de los que 459 fueron de adscripción voluntaria. La dirección de la empresa consideró ayer la nueva sentencia como "un segundo refrendo de que la decisión de reestructuración se ajusta a derecho", así como "la validez de las medidas que se tomaron en su momento".

La decisión judicial se dio a conocer el mismo día en el que los despedidos de la Fábrica de Armas coruñesa denunciaron que la factoría carece de actividad tras su adjudicación el pasado mes de septiembre a la empresa Hércules de Armamento, a la que acusan de haber incumplido las compromisos adquiridos con el Ministerio de Defensa. El expresidente del comité de empresa de la factoría, Roberto Teijido, afirmó que en la instalación tan solo trabajan los 15 vigilantes que se encontraban anteriormente y que no hay ninguna producción, pese a que la compañía anunció que la iniciaría en mayo.

Teijido aseguró además que Hércules de Armamento no invirtió los 4 millones de euros que se comprometió a aportar antes de finalizar 2014 y exigió a las autoridades, a las que ya envió cartas sobre este asunto, que tomen medidas para no ser "copartícipes de esta farsa". Para el portavoz de los despedidos, el reciente cese de cuatro directivos de la empresa como apoderados confirma que en la fábrica "no hay proyecto industrial".

Cargos temporales

Hércules de Armamento argumentó la semana pasada que los destituidos ocupaban su cargo temporalmente por la ausencia del apoderado durante un mes y replicó ayer a los extrabajadores acusando a Teijido de "faltar a la verdad a sabiendas" y explicando que la notificación de la adjudicación de la factoría se produjo el 10 de enero. También destacó que en la empresa "hay exactamente 31 trabajadores en plantilla", a los que se suman 22 empleados de limpieza y seguridad, y que este mismo año habrá "más de 150 empleos directos en la fábrica".

La dirección detalló que desde enero se trabaja en la puesta a punto del complejo, el diseño de los modelos a fabricar y la obtención de los certificados de calidad, así como que el proceso administrativo para conseguir homologaciones y permisos "dura hasta seis meses". La empresa afirmó que también trabaja en su plan de negocio y que ya dispone de un prototipo de nuevo producto y que la actividad industrial "está a punto de comenzar".