El alcalde, Xulio Ferreiro, confía en la "capacidad" de los trabajadores del Concello para poder desarrollar el programa con el que la Marea llegó a María Pita y para hacer frente a los obstáculos que vayan apareciendo por el camino. Ya ha habido uno y tiene que ver con la situación de la tesorería y el desfase entre ingresos y gastos de 21 millones de euros. "Lo bueno, es que ya vamos encontrando soluciones a este problema y estamos generando ilusión", asegura un Ferreiro que destaca los "avances" registrados durante las primeras semanas en cuestiones de "emergencia social, transparencia y apertura de canales de participación".
Precisamente la transparencia es una de las áreas de las que se tendrá que hacer cargo el nuevo alcalde. El nuevo Gobierno local se comprometió a hacer pública toda la información municipal para convertir María Pita en un "Concello con paredes de cristal". ¿Cómo? Publicando las adjudicaciones de todos los contratos municipales, permitiendo la presencia de los partidos de la oposición en las mesas de contratación e impartiendo cursos de formación a los funcionarios para poder trasladar a los ciudadanos que lo requieran toda la información sobre la actividad municipal y en formatos que faciliten su análisis.
