Sting aterrizó ayer en A Coruña a bordo de un avión privado y se dirigió a un hotel de la ciudad, el mismo en el que se alojaron los músicos de su banda que le acompañarán hoy en su concierto en el Coliseum de A Coruñaconcierto Coliseum de A Coruña.

La noche anterior habían actuado en el Festival de la Guitarra de Córdoba. Llegó con discreción, sin dejarse ver, y sobre las ocho de la tarde salió del hotel para cenar en el restaurante Coral, en la Marina, del que se marchó en torno a las diez de la noche para descansar.

Hoy toca prueba de sonido y concierto en el Coliseum. Cuentan desde la promotora de la actuación que no ha pedido ninguna excentricidad característica de las estrellas del pop y el rock; tan solo ha traído consigo un cocinero de confianza. Con poblada barba, camiseta apretada al pecho musculoso y las venas marcadas en los brazos que sostienen su gastado bajo, Sting empezará la actuación a las diez de la noche y mañana se marchará hacia Lisboa, donde actúa el jueves, para continuar con su gira europea.