El pabellón sin uso ni ocupación del Centro de Atención a Personas con Discapacidad (CAPD), el antiguo colegio Santiago Apóstol, tiene las horas contadas. La Consellería de Traballo e Benestar ha informado al Ayuntamiento de su decisión de demoler este pabellón de la instalación de As Xubias. Los técnicos de la Xunta están redactando el proyecto de demolición, que posteriormente enviarán al Concello para que autorice el derribo.

A comienzos de año el Ayuntamiento había abierto un expediente a la Xunta por los desperfectos que presentaba el inmueble y le daba dos meses para presentar un proyecto de reforma. La Federación de Servicios Públicos de UGT había presentado al Concello una solicitud para realizar una inspección urbanística por el mal estado de conservación del edificio y después de alertar de que sus condiciones suponían un "evidente peligro" para los usuarios y profesionales del centro.

El departamento autonómico explica que visitó el inmueble en junio y un técnico analizó todos sus componentes "con detalle". "Si bien la inspección realizada no detectó problemas de seguridad o colapso de la estructura, se opta por demoler el inmueble y, posteriormente, realizar las actuaciones necesarias para la adecuación de este nuevo espacio libre para que estuviera al servicio del resto de edificaciones del complejo", señalan desde Traballo. El edificio abarca 3.500 metros cuadrados de un total de 23.000 que suman los siete pabellones del CAPD.

La Consellería ha establecido de momento un perímetro de seguridad en este recinto del antiguo Santiago Apóstol para evitar posibles daños personales y materiales.

La Xunta consideraba en abril que el pabellón, aunque abandonado, no constituía una amenaza al no estar ubicado en una zona de paso, aunque había vallado su perímetro.

El anterior Gobierno local había recogido en un informe que los inmuebles que conforman el centro de atención a discapacitados se encuentran en estado de abandono general, razón por la que los técnicos municipales proponían que se realizasen "amplios trabajos de conservación y mantenimiento para obtener las condiciones de seguridad, salubridad, funcionalidad, habitabilidad y ornato establecidas legalmente".

Ahora la Xunta pone en marcha el procedimiento para responder a los riesgos que supone el pabellón abandonado. No hay aún fecha para iniciar los trabajos de demolición y adecuación.