Dos años de cárcel, el pago de una multa de 10.800 euros y el abono de una indemnización de 30.000. Esa es la condena a la que se enfrenta Gerardo Crespo, presidente de la Asociación de Vecinos de El Ensanche, por declarar en todos los medios de comunicación en 2009 que diversos funcionarios de la Policía Local actuaban en "connivencia" con los dueños de los after hours de la zona de la plaza de Vigo. Crespo, que también está imputado por ser el presunto cabecilla de la operación Zeta, una trama de fraude relacionada con cursos de formación, se sentará hoy en el banquillo de los acusados debido a la denuncia formulada por la Junta de Personal del Ayuntamiento.

"Realizó graves, reiteradas y disparatadas declaraciones bajo su particular y entera responsabilidad que perjudicaron gravemente a más de 300 funcionarios de policía", subraya la acusación particular en su escrito de calificación. La Junta de Personal sostiene que Crespo, según publicaron los medios de comunicación, aseguró que los agentes "avisaban" a los locales antes de enviar una patrulla e invitó a los vecinos a retrasar el pago de los impuestos locales. El sospechoso está imputado por un delito continuado de calumnias con publicidad. Además, la acusación exige que Crespo rectifique sus declaraciones en los medios.