El proyecto de reordenación del tráfico en A Zapateira mediante la construcción de un nuevo vial entre la avenida de Nueva York y la calle Rego López -en las proximidades de los colegios de las Jesuitinas y las Franciscanas- acaba de ser tumbado por una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que anula la recalificación efectuada en cuatro parcelas de la zona, situadas en el cruce con la calle Londres. El anterior Gobierno local recalificó a la baja ese suelo y lo pasó a urbano no consolidado a pesar de que contaba con todos los servicios urbanísticos necesarios, con lo que sus propietarios quedaban obligados a ceder de forma gratuita los terrenos precisos para construir la nueva calle, aunque el recurso judicial presentado les da ahora la razón y tira por tierra este proyecto.

Es la segunda sentencia que se conoce en pocos días que anula actuaciones previstas en el plan general, en ambos casos con la abogada Elena Talín como representante legal de los afectados, a los que se aplicaron reducciones de la calificación de sus parcelas que ahorrarían notables gastos y trámites al Ayuntamiento al ejecutar los proyectos.

El primer fallo judicial se refería al vial de acceso a la Ciudad de la Tecnología que los empresarios José Collazo y Ángel Jove proyectaban en As Rañas. También en este caso los propietarios de una finca vieron como pasaba de estar calificada como urbana consolidada a no consolidada, lo que suponía que debían ceder suelo para construir el acceso al nuevo polígono sin opción a ser compensados, situación a la que la sentencia del Tribunal Superior de Galicia dio la vuelta.

En A Zapateira, el Ayuntamiento anunció el pasado mes de marzo la realización de una serie de obras en la avenida de Nueva York para evitar los atascos que generan los giros a la izquierda. Los trabajos debían realizarse por la Diputación, que es la propietaria de esa vía, que en aquel momento era utilizada por muchos conductores para acceder a la tercera ronda porque el tramo entre Lonzas y A Zapateira aún no estaba en servicio.

La existencia de varios centros escolares en esa zona, además de la Universidad y de numerosas urbanizaciones, hace de la avenida de Nueva York una vía con una elevada densidad de tráfico. Para llevar a cabo su proyecto, el Ayuntamiento cambió en el plan general la calificación de varias parcelas en los puntos donde deseaba modificar los cruces, lo que llevó a los afectados a presentar alegaciones.

El Ayuntamiento admitió parcialmente la reclamación de los propietarios al mantener la calificación de suelo urbano consolidado para sus terrenos, a excepción de los necesarios para el nuevo vial. Esto llevó a los perjudicados a plantear un recurso en el que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia les da la razón al oponerse a que los terrenos perdieran su calificación "por la sola circunstancia de que el nuevo planeamiento contemple para ellos una determinada transformación urbanística.

Pese a que el Ayuntamiento argumentó que el proyecto no solo afectaba al vial proyectado entre la avenida de Nueva York y la calle Rego López, sino que suponía una "revisión integral de las vías de conexión de toda la zona", el tribunal advierte de que su condición de suelo urbano consolidado "no puede verse eliminada, siquiera parcialmente, por la circunstancia de que una reducida porción de tales fincas se vea afectada por el trazado de un nuevo vial". Según la sentencia, no hay constancia de que esta actuación produzca una mejora urbanística de los fragmentos de las parcelas afectados, así como un beneficio para los propietarios, por lo que estima su recurso y ordena la anulación de la recalificación de las fincas en el plan general, en la que deben ser consideradas en su totalidad como suelo urbano consolidado.

La ubicación de los colegios de las Jesuitinas y las Franciscanas en A Zapateira origina frecuentes problemas de circulación en la zona, ya que la estrechez de la calzada y la inexistencia de espacio para estacionar lleva a los padres de muchos alumnos a dejar sus vehículos sobre las aceras, mientras que los autobuses escolares se ven obligados a realizar complicadas maniobras .

La iniciativa anunciada por el Gobierno local del PP tenía por objetivo resolver estos problemas, pero precisaba de una parte de los terrenos de cuatro fincas situadas. En lugar de optar por la expropiación, el Ayuntamiento recalificó las parcelas en el plan general, lo que le permitía evitar el pago por el suelo necesario.