El túnel de O Parrote sirve de argumento para un nuevo enfrentamiento entre el Gobierno local y la Autoridad Portuaria, ya que el primero se niega a abrir al tráfico el vial mientras no se subsanen las deficiencias apreciadas por los técnicos municipales, según advirtió ayer el alcalde, Xulio Ferreiro, quien informó de que el Concello todavía no dispone de una fecha para la apertura del subterráneo. El Puerto niega, sin embargo, la existencia de problemas en el túnel y acusa al Gobierno local de mantener una "actitud obstruccionista" que perjudica a los ciudadanos por su rechazo a abrir el paso subterráneo.

Ferreiro aseguró que el Gobierno local pretende abrir el túnel "cuanto antes", pero que su principal preocupación es que las obras estén "completa y correctamente terminadas". El alcalde detalló que los técnicos han localizado problemas de falta de estanqueidad en las tuberías de las aguas pluviales, lo que originaría un riesgo de inundación en caso de lluvia. Entre las causas de este defecto se menciona la existencia de hierros clavados, perforaciones de gran tamaño y grietas internas que pueden dar lugar a filtraciones y humedades. El espacio donde se encuentra el baluarte de O Parrote también muestra problemas de bombeo que podrían generar inundaciones.

La Autoridad Portuaria desmintió la existencia de "razones objetivas" que retrasen la apertura del túnel y destacó que recibió la obra el pasado 4 de diciembre, a lo que añadió que no se habría hecho "en el caso de que no se dieran las condiciones necesarias para ello". Sobre la estanqueidad de las tuberías, explicó que están "pendientes de los últimos remates" y que los trabajos se realizarían en horario nocturno, aunque las empresas que inspeccionaron la obra ratificaron que las condiciones "son adecuadas para poner en servicio el vial".

Deficiencias de seguridad

El alcalde también mencionó deficiencias de seguridad detectadas por los bomberos, como los cuadros eléctricos, la sectorialización correcta de los cuartos de instalaciones y el tapado de los pasos de instalación, cuyo fin es evitar que el fuego pase de un espacio a otro. Otro de los fallos localizados es el bloqueo de una de las salidas de emergencia, ya que conduce a la zona de la superficie que aún se encuentra en obras de urbanización.

"Si ocurriese algún imprevisto, no queremos que el túnel posea aspectos que no cumplen la normativa de seguridad vigente", explicó el alcalde, quien rechazó estar "abriendo y cerrando una infraestructura nueva por obras", en especial porque el túnel cuenta con un solo carril. El Puerto replicó a esto que la obra está completa de acuerdo con el proyecto y la normativa vigente sobre seguridad.

El Concello aseguró además que no recibió el manual de explotación actualizado del túnel, los ensayos de estanqueidad de las tuberías de pluviales y fecales, la legalización de la instalación eléctrica de baja tensión, la dirección de obra, el certificado de las instalaciones eléctricas y el boletín de instalación. Según el Puerto, toda esta documentación, incluido el dictamen de seguridad de los tres túneles, se halla en el Ayuntamiento desde el pasado viernes.

Para la Autoridad Portuaria, los argumentos del Gobierno local son una "sucesión de excusas basadas en cuestiones de escasa relevancia" que a su juicio "solo perjudican a los ciudadanos", ya que la imposibilidad de utilizar el túnel evita resolver los problemas de tráfico que aprecia en el centro de la ciudad en los últimos días.