Los placeros han empezado a analizar el borrador de las ordenanzas municipales en las que el Gobierno local está trabajando para renovar la normativa que rige la ocupación de estos espacios públicos. Por ahora, a falta de un análisis más profundo, creen que es necesario introducir una modificación para que los actuales concesionarios de los puestos no se queden "desprotegidos" cuando se acabe su contrato. En el borrador -que está en proceso de enmiendas- se recoge que, una vez que expire el contrato de los placeros, tendrán que abandonar sus puestos, ya que no se les permitirá trabajar "en precario".

En esta situación, por ejemplo, están ahora los placeros del mercado de Santa Lucía, ya que están en un vía de remunicipalización de las instalaciones. La concesión del mercado está prorrogada a la espera de que el titular realice unas obras de acondicionamiento para entregar el inmueble en unas condiciones similares a las que tenía cuando firmó la adjudicación. El objetivo es que, después, el Concello reciba las instalaciones y lo gestione directamente. Mientras eso no ocurre y el Ayuntamiento no abre el concurso para optar a los puestos, los comerciantes pueden seguir ejerciendo su labor en el mercado.

"El concesionario actual así está desprotegido", explica la presidenta de los placeros de San Agustín, Ángela Barrán. Y es que, el Concello dice que la gestión de los mercados será, preferentemente, municipal. "En cuanto se nos acabe el contrato tendremos que cerrar, coger nuestras cosas, irnos y esperar al concurso, que ganaremos o no, según los criterios que se pongan", explica el carnicero Pablo Barbeito, de la plaza de Elviña, que cree que podría introducirse una modificación en el borrador para permitir que los placeros puedan seguir trabajando hasta que el Concello decida qué va a hacer con los puestos cuya concesión ha caducado.

En este anteproyecto de ordenanzas, el Gobierno local prevé también sacar a concurso el medio centenar de puestos que hay vacío en los mercados municipales y hacerlo no mediante el sistema de subasta, como se ha hecho desde 1993, sino por un proceso de concurrencia pública.

El motivo para cambiar esta variable es para que no prime el criterio económico, sino que se tengan en cuenta otras razones para la adjudicación de los puestos. Barrán asegura que es "más democrático" y "más justo" y propone que se tenga en cuenta, por ejemplo, a los emprendedores que tengan un proyecto de venta en los mercados municipales y que quieran empezar a trabajar en ellos para poner en marcha sus "microempresas". El borrador especifica también que no se permiten ni el alquiler ni los traspasos y que cada comerciante solo puede tener la concesión de un puesto.

"No se puede especular con un espacio que es de todos y esta normativa lo evita, porque no puedes traspasar o alquilar algo que no es tuyo", explica Barrán, ya que entiende que los mercados y los comerciantes que trabajan en ellos lo hacen "subvencionados" y con unas facilidades de las que otros negocios carecen.

Entre las medidas que los placeros consideran que son buenas para los mercados municipales está también la eliminación de la figura del comerciante "ambulante" o "temporal" y es que, en algunos casos, cuentan con concesiones que llegan a los veinte años. "Así se iguala a todos los placeros", dice Pablo Barbeito. Y es que, los beneficiarios de estos contratos temporales pagan menos que los demás comerciantes por la ocupación de los puestos. En el borrador se establece que la concesión del espacio será por veinte años y que será improrrogable. Barrán apuesta por la creación de una figura intermedia, sin embargo, que le dé cabida a comerciantes, por ejemplo, de productos de temporada.

Para la presidenta de la asociación de la plaza de Lugo, Chelo Hermida, la ordenanza tendría que ofrecer "prioridad" a los comerciantes que ya están desarrollando su actividad en el mercado frente a los candidatos que quieran optar, por primera vez, a un puesto de venta. "No tenemos acceso directo", critica Hermida, sobre el mantenimiento de sus negocios.

El concejal de Emprego e Economía Social, Alberto Lema, presentó el pasado lunes a los comerciantes el borrador de las nuevas ordenanzas para que las estudien y para conocer sus aportaciones, ya que pretende llevar las nuevas normativas a pleno durante los primeros meses del próximo año. Los comerciantes aseguran que se reunirán pasadas las fiestas para leer con detenimiento la documentación y para solicitar que se introduzcan mejoras en el texto.