Hasta nueve furtivos bajaron ayer a faenar a la ría de O Burgo. Lo hicieron a mediodía y fue el mar el que les obligó a abandonar las aguas de A Pasaxe. Los mariscadores con carné dieron la voz de alarma a los servicios de vigilancia, que tomaron nota del aviso. Hoy bajarán ellos a faenar y lo harán hasta el jueves, que es cuando tienen permiso para hacerlo.

Las mareas, según explica el portavoz de la Agrupación de Mariscadores a Pé, Manuel Baldomir, no son las mejores del año aunque "tampoco son malas de todo". Los mariscadores esperan que "el precio del producto" les "dé la vida" en un año que ha sido muy malo para ellos, por los cierres -tanto por contaminación de hidrocarburos como por toxinas-, aunque saben que hoy tendrán menos moluscos que recoger que ayer, porque una parte se la han llevado los furtivos. La mortalidad de la almeja, además, llega en O Burgo al 20%.