La Corporación municipal cerró ayer en un pleno de una hora las ordenanzas fiscales del próximo año. Marea Atlántica y PSOE acordaron bajar la tarifa del agua a los pequeños consumidores, congelar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y disminuir el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) para los coches de gama más baja. El tributo se incrementará para los turismos de más caballos. El PP ha rechazado la nueva política fiscal porque sostiene que supone "subir los impuestos de forma generalizada e indiscriminada", mientras que el BNG optó por la abstención al no ser tenidas en cuenta dos de sus alegaciones, relativas a revisar la tasa de la basura y derogar "por completo la subida del agua del PP de 2012".

Tanto Marea Atlántica como PSOE defendieron que los impuestos están orientados a una "redistribución de la carga fiscal", es decir, que paguen más los coruñeses que más tienen. "No prometimos rebajar los impuestos, sino reorientar la carga", indicó el concejal socialista José García. El grupo municipal socialista, no obstante, advirtió al Ejecutivo local de que las ordenanzas están "muy lejos de lo que el PSOE quiere para la ciudad y pretende apoyar en un futuro". El edil recriminó a_Marea Altlántica haber avisado al PSOE "hasta en ocho ocasiones" de que mantendrían una reunión sobre los tributos y el encuentro todavía no se ha producido.

El_PP, a través de Rosa Gallego, acusó a Marea Atlántica de "subir los impuestos y bajar los gastos en 57 millones". Los populares propusieron que el IBI regrese al tipo de 2011, al igual que en Ferrol y Santiago, lo que supondría "un ahorro de 6 millones para los coruñeses, con una media de 36 euros por recibo". El_grupo de la oposición se congratuló de que el Gobierno local admitiese parcialmente las alegaciones de la Lonja. El Concello subió para el próximo año el IBI del 0,6% al 1,3% para las empresas asentadas en el Puerto, excepto para aquellas relacionadas con la pesca, que se beneficiarán de bonificaciones del 50%. La edil de Facenda, Eugenia Vieito, subrayó que el tipo impositivo que se le aplicará al Puerto es el mismo que a la refinería o a los centros comerciales. Además, destacó que el Ayuntamiento destinará parte de su presupuesto a la promoción de actividades portuarias. Gallego acusó al PSOE de ser "cómplice" de la subida de gravámenes y le instó a sumarse al Gobierno. "Se sigue dejando tomar el pelo. Que se sume y sea una ola más de la Marea", sentenció. Vieito recriminó al PP haber subido el_IBI y recordó la amnistía fiscal aprobada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy.

La concejal popular incidió en que la bajada de la tasa del agua se traducirá en una reducción de menos de un euro por factura, a lo que el PSOE respondió que no es "algo menor" porque se emiten un millón y medio de recibos. "Supone que Emalcsa deje de ingresar un millón y medio de euros", recalcó García.

El pleno también aprobó ayer de forma definitiva la Ordenanza General de Recaudación, cuya aprobación definitiva estaba pendiente del anterior mandato. La norma incluye la incorporación de procesos telemáticos y la posibilidad de fraccionar y aplazar el pago de impuestos. Marea Atlántica, PP y BNG votaron a favor, mientras que el PSOE se abstuvo. El concejal popular Roberto Coira destacó que el proceso para facilitar el abono de los tributos aprobado ayer fue puesto en marcha por el anterior Gobierno municipal.