Un matrimonio se arrojó ayer desde las ventanas de su vivienda, situada en un segundo piso de O Birloque, durante un incendio que se originó a última hora de la tarde, sobre las 19.30. La mujer, de 44 años, se tiró por la ventana de la fachada que da a la calle, mientras que su marido, de 46, saltó a un patio interior, según informaron fuentes de la Policía Local. Ambos fueron trasladados en ambulancia al hospital Universitario. Los servicios de emergencias indicaron que sufrieron quemaduras. La mujer, además, presentaba traumatismos. Su pareja salió por su propio pié del patio. Ninguna de las lesiones que padecieron revestían gravedad.

Fuentes del 092 señalaron que los residentes en la vivienda se encontraban haciendo "trabajos" en ella y que en el interior había productos inflamables como pintura, barnices o disolventes. La causa del incendio fueron los vapores que desprendieron los productos que los afectados tenían en el salón. "Hay que tener mucho cuidado porque se acumulan los vapores y en contacto con una chispa al encender una luz o al poner alguna herramienta a trabajar producen una deflagración", explicó ayer el director general de Seguridad y Movilidad, Carlos García Touriñán.

Los agentes y bomberos trabajaron hasta pasadas las diez de la noche en el inmueble, que quedó totalmente calcinado. Las llamas presentaron "bastante intensidad", según el servicio de emergencias 112, lo que podría haber provocado daños en la estructura del edificio. El fuego también afectó al piso superior, pero no había nadie en su interior. Los cristales de las ventanas del inmueble explotaron, así como la puerta. Una patrulla de la Policía Local custodió ayer por la noche el piso para que nadie accediese a su interior.

Al lugar del incendio se desplazaron cuatro camiones de bomberos y patrullas de la Policía Local y Nacional, así como dos ambulancias del 061. Los agentes acordonaron la zona y prohibieron la circulación de vehículos. El conductor de un autobús urbano tuvo problemas en una calle estrecha de O Birloque por la que fue desviado como consecuencia del incendio. Los primeros en alertar del fuego al servicio de emergencias 112 fueron los vecinos, quienes aseguraron que escucharon "una fuerte explosión" en la vivienda.

Los residentes en la zona bajaron de sus pisos y se congregaron en las inmediaciones del edificio. "Las llamas se veían a casi un kilómetro", comentaba uno de los vecinos del inmueble colindante al que se produjo el suceso.

El director general de Seguridad y Movilidad recomienda ser "prudentes" a la hora de hacer pequeñas obras en casa. Touriñán advierte de que las pinturas y, sobre todo, los barnices, desprenden vapores cuando están abiertos que son fácilmente inflamables. De hecho, recuerda que el pasado mes de diciembre se produjo un suceso similar en la calle Manuel Azaña, en el barrio de Os Rosales. "Pasó lo mismo, pero no hubo tantos daños como en O Birloque. Solo había un pintor en el interior de la vivienda, pero también tuvieron que acudir los bomberos", cuenta Touriñán, al tiempo que recomienda que las reparaciones en los inmuebles sean hechas por profesionales para evitar riesgos y, en caso de realizarlas los propietarios, deben tener extrema precaución con determinados productos.