La actualización del Plan de Emergencia Exterior del polígono de A Grela-Bens, que hizo pública ayer la Xunta, incorpora a la empresa Alcoa Inespal a las instalaciones del ámbito que ofrecen mayores riesgos de accidentes por su actividad, entre las que hasta ahora solo figuraban Repsol Petróleo, Repsol Butano y Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH).
La actualización del plan afecta además a la correlación que se hacía entre los accidentes y la cantidad de sustancias peligrosas que se almacenan en cada una de las empresas. Esto se traduce en cambios en la lista de supuestos de accidentes que podrían padecer y, por tanto, las medidas que deberían aplicarse ante ellos. La cifra de hipotéticos accidentes graves se rebaja de los 122 que recogía el plan de emergencia de 2010 a los 98 que aparecen en la revisión fechada en noviembre de 2015.
La zona industrial de A Grela-Bens disponía de un Plan de Emergencia Exterior elaborado por la Xunta y aprobado hace seis años y que debe revisarse de forma periódica, por lo que en este caso se adapta a la aprobación del real decreto 840/2015 que establece las medidas de control que deben adoptarse ante los riesgos inherentes a los accidentes graves en que intervengan sustancias peligrosas.
La planta coruñesa de la compañía líder mundial en producción de aluminio primario y fabricado, Alcoa, identifica únicamente una hipótesis accidental según la información proporcionada por el análisis de riesgos de las instalaciones realizado en enero de 2013. El supuesto sería una explosión de su depósito de propano. En CLH existe la posibilidad, según el plan actualizado, de que se produzcan 12 accidentes graves, cuatro menos que en la versión de 2010. Entre ellos, explosiones e incendios por derrame de combustible en los tanques, rotura parcial o total de cisternas o de brazos de carga de gasolina de camiones.
Las instalaciones de Repsol Butano pueden causar en la actualidad el mismo número de siniestros graves que hace seis años, 20, tanto en su área de almacenamiento como en la de carga y descarga. Explosiones con bola de fuego, llamaradas, incendios por derrame de combustibles y fugas de gas inflamable serían las situaciones de mayor riesgo.
Repsol manipula más productos peligrosos, como petróleo crudo, propano, hidrógeno y butano entre casi una veintena, por lo que el riesgo es más alto que en otras plantas. El plan de emergencia de 2015 señala 65 hipótesis accidentales, 29 menos que en el de 2010. Los siniestros más graves serían incendios de tanques, explosiones, llamaradas y fugas de gas tóxico.
El Plan de Emergencia Exterior se ha actualizado y revisado teniendo en cuenta los nuevos informes de seguridad de las empresas, que señalan los daños que los siniestros causarían en las personas (quemaduras, hemorragias, rotura de tímpanos, infecciones tóxicas) y los procesos de respuesta de los operativos de seguridad para minimizar daños y proteger la población.
