El plazo para presentar alegaciones al presupuesto de 2016 finaliza mañana y lo hace sin acuerdo entre Gobierno local y el resto de partidos. Marea, PP, PSOE y BNG presentarán por separado sus propias propuestas para modificar las cuentas después de una semana en la que la oposición centró el debate municipal en las palabras del jefe de Gabinete de Alcaldía, Iago Martínez, que la calificó de "orcos", en alusión a los malos de la película de la trilogía fantástica de El Señor de los Anillos.

Las alegaciones son el mecanismo para que cualquier ciudadano o colectivo enmiende el presupuesto antes de su aprobación definitiva en plenos. En el caso de las cuentas aprobadas el 1 de abril, los informes elaborados por la Oficina Presupuestaria y por la Intervención municipal son críticos con las dos enmiendas de PP y PSOE que, a juicio de los técnicos, introdujeron "incorrecciones técnicas y aritméticas", como partidas a las que se reducía más crédito del consignado inicialmente o nuevos convenios nominativos con asociaciones sin presentar "determinación del objeto de los mismos".

El Gobierno local, que aunque se opuso a estas enmiendas votó inicialmente a favor del presupuesto junto al PSOE, llamó nada más finalizar aquel pleno a cambiar el "despropósito" que a su juicio suponían esos cambios. Sin embargo, y desde entonces, el Ejecutivo no se ha sentado con el resto de partidos sobre la mesa de negociación.

El grupo socialista reclamó en varias ocasiones al Gobierno que convocara la Comisión Informativa de Facenda para, en presencia de los cuatros partidos, consensuar con los técnicos municipales unas alegaciones que solventasen los problemas a los que hacían referencia los informes. El Gobierno rechazó aceptar esta vía al entender que el PSOE pretendía convertir la Comisión en una mesa de negociación a cuatro, si bien tampoco fueron capaces de abrir las conversaciones por otros cauces.

Fuentes del Gobierno local aseguran que la Marea presentará mañana sus propias alegaciones y que, a partir del miércoles, tratará de buscar el apoyo del PSOE a sus propuestas. Los socialistas ya han criticado esta vía al entender que el Ejecutivo pretende "imponer" su criterio al buscar abrir la negociación después que se cierre el plazo para presentar las alegaciones.

De entre los cambios introducidos por las enmiendas de PP y PSOE, el Gobierno se había mostrado especialmente crítico con la rebaja de 600.000 euros en los créditos presupuestarios del Instituto Municipal Coruña Espectáculos (IMCE) o en la rebaja de fondos para la concejalía de Participación e Innovación Democrática.

Los informes técnicos también señalan que algunas minoraciones de crédito introducidas en las enmiendas de socialistas y populares son imposibles de llevar a cabo ya que "no existe en el presupuesto aprobado crédito suficiente para operaciones de gasto que ya se efectuaron o se comprometieron debidamente" en el presupuesto prorrogado. La oposición reprocha en este sentido que el Gobierno local no les facilitó antes del pleno los informes sobre el estado de ejecución de las cuentas de este año, por lo que no podían conocer qué parte de las partidas había sido ya comprometido.