Los grupos municipales del Gobierno de Marea, el PSOE y el BNG aprobaron ayer en el pleno una moción socialista en defensa de la sanidad pública, en la que se abstuvo el PP. La iniciativa incluye siete exigencias a la Xunta y al Gobierno central, una de ellas para recuperar personal de Ginecología en el Centro de Orientación Familiar de O Ventorrillo, la puesta en marcha de un servicio de Pediatría en horario de tarde en el centro de salud de Novo Mesoiro, más dotaciones en el centro de O Castrillón y completar plantillas cubriendo bajas y vacaciones en los centros de salud de la ciudad "para evitar la existencia de listas de espera en Atención Primaria y Pediatría".

La moción aprobada insta también a la Corporación municipal a exigir la supresión de recortes, a elaborar un informe sobre el número de coruñeses afectados por las restricciones en el acceso al tratamiento contra la hepatitis C y a recuperar el carácter universal de la sanidad pública.

El BNG defendió que Galicia gestione su propio sistema sanitario, Marea atribuyó al PP "el desmantelamiento" de la sanidad pública y los populares recalcaron que la sanidad "no es patrimonio de ningún partido".

El pleno aprobó también otra moción socialista presentada con motivo del 17 de mayo, Día Internacional contra la LGTBIfobia, sobre medidas para combatir la discriminación por orientación sexual e identidad de género y promover acciones formativas e informativas. Obtuvo respaldo plenario una moción del grupo popular que solicita al Concello que se adhiera el programa de la Xunta de viviendas vacías para que se pongan a disposición de afectados por desahucios. Marea y BNG se abstuvieron.

Una de las pocas mociones que no tuvo el visto bueno fue la presentada por el PP para reclamar ayudas a colectivos afectados por el cambio de los nombres de las calles.