La piscina de las instalaciones deportivas de la fábrica de armas abrirá al público a finales de este mes, según la Empresa Municipal de Vivienda y Servicios (Emvsa), que justifica que no se haya puesto a disposición de los vecinos de la zona aún por la rotura de una tubería, que obligó a efectuar obras en el lugar. La asociación de vecinos de Pedralonga había reclamado al Concello la apertura del complejo tras ser informada por el personal que presta allí sus servicios de que este verano no funcionaría la piscina debido al elevado coste que supone para Emvsa, ya que la empresa no cobra ninguna cuota a los numerosos usuarios que acuden allí.

La entidad vecinal fue citada para el próximo 13 de julio a una reunión con los concejales de Rehabilitación Urbana, Xiao Varela, y Culturas, José Manuel Sande, para intentar abrir la piscina lo antes posible, ya que lo habitual es que estuviera abierta desde mediados de junio. Pero al contactar este periódico con Emvsa, la empresa aseguró que el retraso en la apertura se debió a la rotura de una tubería de agua y que se estima que antes de que termine junio podrá utilizarse la piscina.

También informó la compañía municipal de que en este momento se lleva a cabo el proceso para la contratación de los socorristas, aunque si estuviera previsto el inicio de la actividad a mediados de mes estos profesionales ya tendrían que haber sido contratados.

"El año pasado ya no querían abrir porque dicen que la piscina les acarrea muchos gastos", afirma María José López, presidenta del colectivo vecinal de Pedralonga, quien explica que la rotura de la tubería obligó a cerrar el bar del recinto porque ocurrió en la terraza del establecimiento y que Emvsa se negaba tanto a arreglarla como a que la concesionaria del local lo hiciese. "Hablamos con el Concello y al día siguiente la arreglaron", asegura la dirigente de la asociación .

El Gobierno local de Carlos Negreira negoció en 2014 con el Ministerio de Defensa la cesión de las instalaciones deportivas de la fábrica de armas por un periodo de 5 años y adjudicó su gestión a Emvsa. En aquel momento la piscina para adultos del recinto ya se encontraba averiada, aunque el Ejecutivo municipal aseguró que en breve se repararía para su entrada en servicio, aunque dos años más tarde sigue cerrada debido a los daños que sufre.

El complejo, que además de las dos piscinas cuenta con pistas deportivas, era usado de forma tradicional por los vecinos de Pedralonga, Santa Gema y Palavea durante el funcionamiento de la fábrica de armas, que les cobraba una cuota mensual por su asistencia. Tras el paso a manos del Ayuntamiento, se decidió no exigir el pago de ninguna cantidad y únicamente se solicita a los usuarios que faciliten a la entrada su nombre y el número de su carné de identidad, una situación insólita en el conjunto de las instalaciones deportivas municipales coruñesas y que la propia Emvsa admite en su memoria de gestión.

"El verano pasado abrió a finales de julio porque peleamos mucho para que se abriera", señala María José López, quien recuerda que el anterior alcalde prometió que las instalaciones iban a estar a disposición de los vecinos de los barrios más próximos, por lo que exigen que "se cumpla lo prometido". Pese a que la piscina para adultos está inutilizada y la única disponible es para niños, son muy numerosas las personas que acuden al recinto. "Más cerca que eso no tenemos nada, solo la playa de Santa Cristina", explica la presidenta de la asociación de Pedralonga, quien también menciona la utilidad que tienen las pistas polideportivas.

"Si dejamos que eso se cierre nuestros niños no tendrán donde jugar, por lo que tenemos que luchar con uñas y dientes", destaca López, quien advierte de que los vecinos no pueden "estar todos los años con lo mismo". Sobre la alusión que los responsables de las instalaciones hacen al coste de su mantenimiento, afirma que los vecinos están dispuestos a que les cobren una "cuota mínima", del mismo modo que se hacía cuando era gestionadas por la propia fábrica de armas.

El Gobierno local actual pretende incluir en la operación de venta del campo de fútbol de A Grela II a Estrella Galicia la adquisición de la zona deportiva de la fábrica de armas, para lo que inició ya el trámite urbanístico necesario. Con el dinero obtenido de la empresa cervecera, el Concello proyecta hacerse con estas instalaciones para incrementar la dotación de servicios públicos en esta zona del municipio.