El grupo de Gobierno de Marea Atlántica y los de la oposición, PP, PSOE y BNG, mostraron ayer su apoyo a iniciar los trámites para ejecutar una modificación parcial del plan general con el objetivo de proteger la Torre de Hércules, esto implica que no se pueda construir en el Agra de San Amaro.

Fue la concejal nacionalista, Avia Veira, la que presentó esta moción al pleno, que recibió el apoyo unánime de la Corporación municipal. La edil socialista Yoya Neira solicitó al Gobierno local que dé "un paso adelante" y que realice además un plan especial para mejorar el ámbito de la Torre de Hércules, con la reordenación de las instalaciones de la ciudad deportiva, con especial atención "a los volúmenes" que molesten la visión del monumento patrimonio de la humanidad, así como con la reubicación del aparcamiento y la ampliación de los servicios que se les ofrecen a los visitantes.

El concejal Martín Fernández Prado, que fue edil de Urbanismo durante los cuatro años de Gobierno del PP, recordó que, si bien su postura no había sido esa cuando tenían mayoría absoluta y gobernaban en María Pita, en la campaña de las elecciones municipales, el entonces candidato Carlos Negreira, ya había dicho que no se construiría en el Agra de San Amaro si repetía en el sillón de la Alcaldía.

El PP culpó tanto a PSOE como a BNG de que ese ámbito no estuviese protegido ya y el concejal de Rexeneración Urbana e Dereito á Vivenda, Xiao Varela, mostró ayer su alegría por que este proceso contase con consenso. "Hay que destacar que la situación urbanística con la que nos encontramos al llegar a María Pita hace un año era y está siendo especialmente compleja, precisamente derivado de las gestiones llevadas a cabo por las anteriores corporaciones", dijo Varela.

Otra de las mociones que recibió el visto bueno del pleno, aunque no de todos sus integrantes, ya que contó con la abstención de la concejal nacionalista, Avia Veira, fue la del Museo de la Automoción de la Fundación Jorge Jove.

La concejal socialista Silvia Longueira presentó esta moción y afeó al Gobierno local su "falta de interés" en el proyecto cuando algunas de las piezas de la colección de la fundación, como el archivo de la Pegaso, son "codiciadas por otros museos". En el PSOE y también en el PP defienden que el equipamiento podría llevar aparejado no solo la actividad expositiva sino también una oportunidad de formación y de empleo en la ciudad, ya que consideran que se podrían realizar cursos de automoción bajo el paraguas de este recinto.

El BNG se abstuvo en esta votación, ya que los nacionalistas consideran que, en su punto número tres, la moción no dejaba claro que el equipamiento no se fuese a construir en el parque de Bens, un extremo que consideran innegociable. Desde el BNG solicitan, además, que haya una "contraprestación para la ciudad" si, finalmente, este museo se construye en terrenos públicos.

Una visión bien diferente mostró ayer la concejal del PP Luisa Cid, que considera que contar con la colección de la fundación Jove ya es "un activo" y una contraprestación para los vecinos y pidió a los que se oponen a que se ubique en Bens a que "busquen" otro lugar.

El concejal de Rexeneración Urbana e Dereito á Vivenda, Xiao Varela, fue el encargado de defender la postura de Marea Atlántica y aseguró que la moción recoge la "hoja de ruta" del Ejecutivo municipal.

"Este Gobierno local tiene muy claro que este museo no se va a construir en el parque de Bens, ya que queremos mantener su carácter de equipamiento público y de pulmón de la ciudad", dijo Varela, quien aseguró que la ubicación en Bens del museo no era la adecuada, por su proximidad a la refinería, por lo que han instado ya a la fundación Jorge Jove a que presente al Concello otras ubicaciones.