La declaración del empresario coruñés Gerardo Crespo, presunto cabecilla de la operación Zeta, que investiga el presunto fraude de subvenciones destindas a cursos de formación, se aplaza al 12 de diciembre. La juez instructora había citado al sospechoso el 22 de noviembre, pero su abogado, José Ramón Sierra, solicitó el aplazamiento porque ese día tenía señalado un juicio. La titular de Instrucción número 6 también reservó el día siguiente, el 23 de noviembre, por si en esta ocasión Crespo decide responder a sus preguntas, ya que el 3 de febrero de 2015, la primera vez que fue citado, se negó a testificar. El retraso del día que Crespo deberá presentarse ante la juez provocó que también se posponga la declaración del otro supuesto líder de la presunta trama, el presidente de la Confederación de Autónomos y Profesionales de España (Caype), Eliseo Calviño, que fue citado para el 15 de diciembre.
Hasta ahora, ninguno de los dos prestó declaración ante la juez, si bien rompieron su silencio ante los medios de comunicación. Calviño llegó a convocar el pasado mes de abril una rueda de prensa para proclamar que la operación Zeta es "una caza de políticos egoístas" urdida contra Crespo. El empresario coruñés achacó su negativa a responder a las preguntas de la instructora a la falta de un informe de la Agencia Tributaria sobre su patrimonio y la cantidad de dinero que presuntamente defraudó. "No sabemos de qué hay que defenderse", indicó Crespo a la salida de los juzgados el pasado mes de febrero.
