El Ministerio de Fomento volverá a redactar el proyecto de ampliación y humanización de Alfonso Molina. Por un lado, lo adaptará a la nueva Ley de Carreteras, aprobada en 2015, y por otro lo adecuará a los acuerdos alcanzados con el Ayuntamiento, tanto en el diseño de la ampliación del vial como en la integración ambiental de sus márgenes.

El departamento ministerial encomendó el 1 de agosto a uno de sus entes públicos dependientes -la Sociedad Mercantil Estatal Ingeniería y Economía del Transporte-Ineco- la asistencia técnica para la "actualización del proyecto de construcción y mejora de la capacidad e integración ambiental de ambas márgenes en la avenida de Alfonso Molina". Para "evitar mayores retrasos", "acelerar la realización de este proyecto" y "resolver la situación actual de congestión" del vial, se determina "la necesidad de que sea redactado con medios propios del Ministerio de Fomento", lo que elude una nueva licitación.

Aún así, los plazos se alargan. Estiman que el nuevo diseño estará en un año y después quedará someterlo de nuevo a exposición pública, trámite obligado por la Ley de Expropiación Forzosa como por la nueva normativa estatal de Carreteras. En esta fase es en la que se quedó la propuesta inicial. Posteriormente rematará la redacción, recogiendo las alegaciones que se consideren pertinentes. Se procederá entonces tanto a la expropiación de los terrenos necesarios como a sacar a concurso los trabajos.

El Proyecto de Construcción incluye, según la resolución de Fomento a la que ha tenido acceso este periódico, la ampliación de los carriles en la zona pactada, la demolición y nueva construcción de dos pasarelas peatonales, la construcción de una nueva pasarela peatonal en Pedralonga, la ampliación del tablero del puente de acceso a Pocomaco, además de la creación de un lazo para acceso a la AC-10 (desde rotonda de Matogrande hasta la entrada del Puerto en Oza pasando por el túnel de Eirís). Figura también la nueva incorporación desde el polígono de A Grela, la nueva rodadura y las marcas viales y una reordenación en Matogrande.

En el proyecto actualizado también estará la "Integración Ambiental del entorno de la avenida de Alfonso Molina con el diseño de sendas peatonales y carriles bici". Según recuerda el Ministerio de Fomento, este proyecto ya está en fase de redacción. Paralelamente, el Concello ha encargado unos estudios previos sobre la actuación en la zona que se incluirá en la información de los concursos públicos.

La financiación sigue comprometida, según especifica el Ministerio de Fomento. El proyecto será financiado por la concesionaria de la AP-9, Audasa, junto a obras en Santiago y Vigo, en virtud de un convenio que permite a la empresa una subida adicional de peajes del 1,5% durante dos décadas. El presupuesto de la actuación, demandada desde hace años, alcanza los 14 millones de euros, con IVA, de acuerdo con las valoraciones de la Demarcación de Carreteras del Estado de Galicia incluidas en el expediente de la encomienda al Ineco. El proyecto encargado tendrá que abordar un nuevo estudio de los flujos de tráfico, por el desfase de los actuales, con una proyección de veinte años después de la fecha prevista de la entrada en servicio de la carretera. También las afecciones al tráfico durante la obra y sus medidas paliativas.