Entre los días 10 y 23 de octubre, se desarrolló el tercer Curso de Interpretación Vocal que imparte cada año en nuestra ciudad el maestro Alberto Zedda. Durante muchas horas, el músico italiano trabajó intensamente con los cantantes que han venido desde distintos lugares de España y del mundo. El resultado no ha podido resultar más satisfactorio, a tenor de lo escuchado a los catorce intervinientes en el concierto de clausura. Fueron ocho sopranos, dos mezzosopranos, un contratenor, un tenor y dos barítonos. Algunas voces coruñesas mostraron cualidades sobresalientes. Clara Panas, soprano moldava afincada en los alrededores de La Coruña, deslumbró con una extraordinaria versión de la gran escena de La sonnambula, de Bellini; y Helena Abad cantó muy bien un aria de Tancredi, de Rossini, y estuvo espléndida en la de Romeo y Julieta, de Gounod. Christian Gil es un contratenor dotado de una voz de muy alta calidad y además canta de modo perfecto. Sería ideal que interpretase en su ciudad una ópera barroca o un bello recital como los que le hemos escuchado a Jaroussky. Pedro Martínez, muy bien, en el dúo de Don Giovanni, de Mozart, con la ferrolana, Patricia Rodríguez. Ella estuvo espléndida en la difícil aria de Candide, de Bernstein; y él cantó muy bien un aria de La Cenerentola, de Rossini. Julia Martínez y Rosalía Cid fueron muy aplaudidas por su dúo (barcarola), de Los cuentos de Hoffmann, de Offenbach. El público, gratamente sorprendido, manifestó un enorme entusiasmo, que hizo extensivo a la mezzo Guillermina Gallardo, las sopranos Esperanza Mara, Xiana Insua y Cecilia Rodríguez, además del tenor Jaime Sierra y el barítono, Pablo Nieves. Natalia Lamas y José María Paz Gago, presidenta y vicepresidente de Amigos de la Ópera, impusieron a Alberto Zedda la medalla de oro de la asociación y fue nombrado, además, socio honorario de la misma, en medio de una gran ovación. ¡Querido maestro!
