El Cuarteto de Zagreb dio su primer concierto en 1919; está muy cerca de cumplir cien años; nuestra Filarmónica, que se fundó en 1904, los ha rebasado con creces. La agrupación nos ha visitado varias veces a lo largo de nuestra historia. Al parecer, no había vuelto desde 1962. Es mucho tiempo sin disfrutar de la extraordinaria calidad de este grupo de cámara en el que cada uno de los integrantes es un verdadero solista, capaz de someterse al grupo para que se obtengan como resultado unas versiones impecables de las grandes obras del repertorio. Y también de partituras contemporáneas, como las Cuatro miniaturas (1963), de Adalbert Markovic (1929-2010) con que se abrió el concierto. Preciosa versión del encantador cuarteto de Mozart, llamado La primavera. Obra colmada de belleza, de ingenio y de buen humor interpretada con rara perfección y refinamiento por el Cuarteto de Zagreb. El cuarteto de Dvorak, que lleva como sobrenombre Americano, fue escrito durante la etapa en que el compositor vivió en los Estados Unidos. Es su obra de cámara más conocida, junto con el Trío denominado Dumky. Versión espléndida de los músicos croatas: arrebatadora, vibrante y colmada de una hermosa melancolía en el maravilloso tiempo lento. El público manifestó un gran entusiasmo y fue correspondido con Arabesque, obra del compositor croata contemporáneo, Juraj Tkalcic (1922-2000).