La Diputación provincial avanza los trámites para convertir el Colegio Calvo Sotelo en la primera residencia universitaria pública de la historia de la Universidade da Coruña. El Gobierno provincial sacó ayer a concurso las obras para adaptar este centro, situado en Labañou, con un precio de licitación de 2,5 millones de euros. Los trabajos, con un periodo de ejecución de nueve meses, se desarrollarán en dos fases, de 962.951 euros y 1.553.421 euros, respectivamente.

El proyecto prevé reformar las 60 habitaciones dobles ya existentes y habilitar un mínimo de 28 cuartos más. Estas 88 dependencias tendrán una superficie aproximada de 20 metros cuadrados, contando con armarios empotrados y baño propio, con ducha, un retrete y dos lavabos. De esta forma, se demolerán los baños comunitarios actuales, convirtiendo estas zonas en espacios comunes.

Como novedad, se realizarán obras para mejorar la accesibilidad al edificio, instalando una rampa de acceso y un ascensor adaptado en el interior, y se creará un nuevo acceso a la residencia desde la plaza situada al este, frente al Museo Nacional de Ciencia y Tecnología (Muncyt). También se construirá una nueva escalera de evacuación lateral y se habilitarán los equipos adecuados para hacer posible el control y la extinción de incendios

Las obras salen a concurso después de que la Xunta diese luz verde a la conversión de este inmueble en residencia pública de estudiantes, al entender que los cambios realizados en el ordenamiento urbanístico de la ciudad para poder abrir la instalación no justificaban el inicio de un estudio de impacto, al no causar ningún efecto ambiental significativo. En el proyecto de modificación puntual del PGOM presentado por el Concello ya se señalaba que esta apertura podría rebajar los precios en las viviendas de alquiler para estudiantes del entorno. Se destacaba también que la instalación obligaría a reforzar algunas líneas del transporte urbano o prever nuevas conexiones con el campus de Elviña, sobre todo durante el curso y en determinados horarios. En el documento además se pone de relieve la necesidad de disponer "aparcamientos públicos y previsión de carril bici" además de parking para bicicletas en el entorno del colegio.

La Universidade da Coruña es una de las pocas de todo el Estado que no cuenta con una residencia pública de estudiantes en su principal campus. El proyecto para habilitar este servicio en el Calvo Sotelo comenzó a tomar forma en octubre de 2015, con la firma de un convenio entre la Universidade da Coruña y la Diputación, titular del colegio actualmente.

Desde 1994 y hasta el curso pasado, la única residencia que se ofrecía a los matriculados en la UDC, a través de un convenio de colaboración, era Rialta, propiedad de la Fundación María José Jove. Precisamente, esta entidad reclama en los tribunales a la UDC el abono de casi seis millones de euros como indemnización por no haber renovado el acuerdo firmado en 1994, por el cual la UDC subvencionaba el alojamiento en Rialta a los universitarios.