Catorce meses después de que el Ministerio de Fomento licitase la redacción del proyecto de ampliación del puente de A Pasaxe, esta actuación todavía no ha sido adjudicada por el departamento que ahora dirige Íñigo de la Serna. Fuentes del ministerio informaron a este periódico que la previsión es que la elaboración del documento comience el próximo año, lo que llevaría el inicio de las obras al año 2018, puesto que el plazo para disponer del proyecto es de nueve meses, tras lo que tendrá que ser sometido a exposición pública para la presentación de alegaciones.

La programación inicial realizada por el Gobierno central en los Presupuestos Generales del Estado de este año ya era irreal, puesto que preveía destinar 779.000 euros a las obras en este mismo ejercicio, cuando era imposible que comenzaran antes de 2017. Para ese año se reservaban 3 millones, mientras que para 2018 había 10 millones y 12 millones más para 2019, lo que se sobreentiende que ese era el año previsto para terminar la ampliación.

Pero hay que tener en cuenta que una vez que se cuente con el proyecto, habrá que licitar la construcción, proceso que también durará varios meses y, además, la posibilidad de que haya que someter el proceso a una evaluación ambiental aún podría demorar más el comienzo de los trabajos. Por si fuera poco, todavía se desconoce el tiempo que durará la ampliación del puente con un carril más por cada sentido, aspecto que tendrá que definir el proyecto que apruebe el ministerio, que sin embargo estima que las obras tendrán un coste en torno a los 24,5 millones de euros.

La anterior ministra de Fomento, Ana Pastor, fue quien anunció en febrero de 2015 -poco antes de las elecciones municipales- la intención de su departamento de ampliar el puente para resolver el problema que representan los frecuentes atascos que sufre. La buena sintonía de Pastor tanto con el Gobierno local del PP como con el de Marea Atlántica hacían prever que los proyectos de su departamento se tramitarían de forma ágil, ya que tras el cambio político en el Concello su equipo se mostró dispuesto a modificar la remodelación de Alfonso Molina que había acordado con el Ejecutivo de Carlos Negreira.

Pero el estancamiento administrativo causado por la convocatoria de nuevas elecciones generales y la salida de Pastor de Fomento hicieron que tanto el proyecto de Alfonso Molina como el de A Pasaxe se hayan quedado paralizados, lo que retrasará aún más una tramitación ya de por sí larga.

Cuando se publicó el pliego de condiciones de la licitación de la redacción del proyecto de A Pasaxe se distribuyó su presupuesto, de 870.000 euros, en dos anualidades, de forma que este año habría disponibles 483.000 euros y el próximo los 241.000 restantes, aunque la demora en su adjudicación hará que se concentre en 2017, como deberán confirmar los Presupuestos del Estado del próximo año.

El objetivo del proyecto es definir la forma en la que se dotará al puente de un carril más de circulación por cada sentido, además de aceras más anchas y carril bici. El planteamiento de Fomento es que se construya un puente paralelo al actual por la parte izquierda en sentido de salida de la ciudad con la misma anchura, 25 metros, y longitud, 225 metros.

El puente ampliado contará con conexiones con los paseos marítimos de O Burgo, Perillo-Santa Cristina y el proyectado en As Xubias, pero también obligará a reformar los actuales nudos de carreteras existentes a ambos lado del viaducto, lo que sin duda generará importantes problemas de tráfico durante la ejecución de la ampliación.