La dimisión, este jueves, de José Manuel Dapena como portavoz del grupo municipal del PSOE ha hecho más visible la división entre los concejales socialistas. El motivo: decidir quién llevará la voz cantante de la formación en el Concello a partir de ahora. Los ediles celebraron ayer por la tarde, antes de que Barcón hiciese pública su renuncia como secretaria general de la agrupación local, una reunión en la que se pusieron sobre la mesa los dos nombres que compiten por suceder a Dapena: José Manuel García y Silvia Longueira.

El primero, propuesto por la propia Barcón, cuenta también con el respaldo de Fito Ferreiro. Yoya Neira propuso a Longueira, que había anunciado que se postularía al cargo si Barcón no era la candidata a portavoz. Dapena mostró su preferencia por que Mar Barcón volviese al frente dada su experiencia política, aunque no llegó a proponerla formalmente. La decisión final corresponde en exclusiva a los seis ediles, que decidieron "darse unos días" para realizar la votación. El encuentro de ayer se centró en la postura que mantendrá el PSOE en la negociación de los presupuestos con el Gobierno municipal de la Marea Atlántica, que no ha trascendido.

Las diferencias de Longueira y Neira con el resto del ediles del grupo se han agudizado a medida que ha avanzado el mandato. Uno de los principales foco de discordia es el protagonismo otorgado a José Manuel García, que entró como independiente de la mano de Barcón en el número dos de la candidatura de las pasadas municipales y después se afilió al Partido Socialista. En todo este tiempo, García ha ido sumando protagonismo y ha lleva la voz cantante del grupo municipal en negociaciones trascendentales, como la del presupuesto municipal, incluso en los debates plenarios.

El ala más izquierdista de los socialistas no ha visto con buenos ojos el rol que se ha asumido García, a quien considera un político con perfil alejado del socialismo. Algunos militantes no dudaron en airear sus diferencias con él cuando acudió a la misa en honor a la virgen del Rosario -siendo el único concejal socialista presente, acompañado solo de ediles del PP- o cuando se mostró ambiguo en torno a la retirada del Palacio Municipal del águila franquista que decora la vidriera principal. La propia Yoya Neira escribió el siguiente comentario en la red social Twitter después de aquella polémica: "Mi partido parió la Ley Memoria Histórica para retirar toda exaltación del fascismo. Quien se aleje de ello va en contra de nuestra razón de ser".

La división en el grupo municipal coincide con las negociaciones con el Ejecutivo para acordar el presupuesto para 2017. Los socialistas, llamados a ser el socio preferente de la Marea Atlántica, votaron el pasado 28 de diciembre en contra del proyecto presupuestario del Gobierno, al entender que no se había diseñado contando con ellos. Como telón de fondo, se encuentra la oferta del PSOE de conformar una coalición de Gobierno, una posibilidad que Marea Atlántica solo ve factible si ambos grupos generan un clima de confianza y entendimiento mutuo.