En las instalaciones de IB Cinema, entre productos químicos, está renaciendo La ciudad de las rías, una película de finales de los años sesenta en la que se publicita el proyecto del arquitecto Andrés Fernández-Albalat en el que planeaba unir las urbes de A Coruña y Ferrol a través de núcleos de población que le dieran una continuidad a estos dos grandes municipios. Entonces, Albalat defendía la ciudad-ciudad, que hubiese entre A Coruña y Ferrol barrios de 8.000 habitantes, con sus centros cívicos y su vida independientemente de los grandes centros, sin convertirse nunca en extrarradio o cargar con el sambenito de afueras.

Cuenta el cineasta Ignacio Benedeti que la tarea de recuperación de la obra no fue fácil, ya que la película estaba dividida en cinco piezas compuestas por varios rollos y no todos estaban juntos, así que, antes de devolverle la vida a este documental olvidado, Benedeti y su colaborador Fernando Pujalte tuvieron que buscar y preguntar para conseguir unir los trozos que faltaban hasta que, finalmente, todo encajó. "Algunos propietarios ya habían fallecido, así que tuvimos que preguntar a los herederos que, muchas veces, no sabían qué tenían que buscar. Una parte apareció en una cajita que tenían en una biblioteca y otra estaba en unas condiciones pésimas, ni siquiera conservaba los 16 milímetros de ancho de la película original", relata Benedeti, que hace esta actividad de recuperación de viejos filmes "sin apoyo institucional".

Quedan todavía incógnitas sobre quiénes son algunos de los protagonistas del documental, ya que carece de rótulos y el narrador no siempre introduce a las voces que hablan de este proyecto, así intentarán que algunos de sus protagonistas la vean para que desvelen la identidad de los olvidados. Durante la tarde de ayer, la película estuvo sumergida en tratamientos químicos para recuperar las condiciones de exhibición que algún día tuvo. Benedeti indica que, solo viendo la película, se puede entender la importancia que tuvo el proyecto -presentado en 1968- aunque nunca hubiese salido adelante ya que en ella aparecen alcaldes y hasta un plano aéreo de la zona afectada, Albalat en su avión, "quizás" el que entonces era el presidente de la Diputación y, sobre todo, los 16 milímetros. "No fue una película barata", resume y apuesta por que la financiación llegase de las arcas provinciales, ya que era la institución que más apoyaba la creación de este gran espacio de relación entre A Coruña y Ferrol.

El entonces alcalde Betanzos era el que más apoyaba el proyecto hasta llega a decir en el documental que, poniéndolo en marcha, su Concello sería el centro de esta gran urbe y A Coruña y Ferrol pasarían a ser meros polos industriales. Los regidores de Sada y de Pontedeume, sin embargo, no acababan de ver clara esa retirada de fronteras. En pleno franquismo mostraban una postura discordante con la Diputación.