Copasa, la empresa que construyó el túnel de O Parrote, presentó ayer a la Autoridad Portuaria las soluciones que propone para evitar nuevas filtraciones de agua del mar que causen abombamientos de la calzada como el que obligó a cerrar al tráfico este vial subterráneo. Los técnicos del Puerto analizarán ahora estas propuestas para determinar si son adecuadas para resolver el problema, por lo que habrá una nueva reunión entre ambas partes en la que se decidirá cuál es la medida que se adoptará.

La entrada de agua bajo el pavimento del túnel se produjo por el mal funcionamiento de los aliviaderos que debían haberla canalizado, de forma que generó una presión sobre el asfalto que acabó por levantarlo. Para extraer el agua, Copasa efectuó cortes en la calzada, aunque tanto el Puerto como el Concello le ordenaron que resolviese el problema de forma definitiva.