Uno de los asistentes que tomó el micrófono para intervenir acusó a los responsables del Hogar Sor Eusebia de querer llevar al barrio a "alcohólicos, drogadictos y gente con problemas mentales a los que no quieren ni en los centros de acogida". "Esa concejal es una etarra, una comunista", comentaba una vecina mientras la concejal Silvia Cameán exponía la actuación del Concello.
Fueron varios los residentes que criticaron duramente la elección de un parque para instalar este proyecto para personas sin hogar, así como su proximidad al Hospital Universitario, al que acuden a diario miles de personas. Tras pedir perdón por haber perdido los nervios al inicio de la reunión, el presidente de la entidad vecinal, Jesús Prado, exigió que se anunciase allí mismo cuál es la decisión municipal sobre Mi Casita. "Aún no sabemos nada y necesitamos dormir tranquilos, que los concejales nos digan que eso se puede cambiar", proclamó Prado, mientras que Manuel Vilaboy anunció que los vecinos harán lo que sea posible para evitar la instalación del refugio en el barrio.
El director del Hogar Sor Eusebia, Diego Utrera, había acudido al acto para explicar las características de Mi Casita, aunque al trasladarse la reunión al exterior optó por no intervenir.
