El Gobierno local abrirá la próxima semana la licitación de la redacción del proyecto y la ejecución de las nuevas cubiertas del estadio de Riazor, con la previsión de adjudicarlos antes de finales de año y comenzar las obras en mayo de 2018. El concejal de Culturas, José Manuel Sande, detalló que el coste de la actuación será finalmente de 8,2 millones frente a los 7 millones previstos inicialmente por la decisión de prolongar la cubierta de Preferencia hasta la mitad de la grada inferior.

Sande calificó este proyecto como "una de las grandes obras" de este mandato municipal y aseguró que ha habido "consenso" con el Deportivo, con el que la relación "siempre fue buena". El concejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, detalló que además de prolongar la cubierta de Preferencia se cerrarán los fondos superiores de todas las gradas para evitar el paso del viento y la lluvia, mientras que en el exterior se suprimirán los tensores que sujetan las cubiertas.

El antes y el después de la cubierta del estadio de Riazor.

Varela también explicó que en el interior la visibilidad aumentará, ya que los espectadores podrán ver el resto de las gradas e incluso el cielo. La cubierta podrá tener un mejor mantenimiento ya que las placas podrán ser pisadas, mientras que en el interior habrá una pasarela para acceder al cableado y los focos.

Durante tres meses del verano de 2018 habrá que ocupar el césped para retirar las cubiertas de Preferencia y Tribuna y colocar unas nuevas, lo que obligará a sustituir también el terreno de juego. Tras el comienzo de la temporada y hasta mayo de 2019 se desarrollarán los trabajos de reparación de Pabellón y Maratón, que no afectarán a los espectadores, ya que se realizarán con andamios suspendidos.

El antes y el después del campo y las gradas del estadio de Riazor.

Varela aseguró que esta reforma no disminuirá el espacio en las gradas, sino que incluso aumentará por la retirada de unos canalones existentes en la actualidad. El concejal señaló que la mayor superficie de la nueva Preferencia y la necesidad de incrementar la resistencia de la estructura con acero son las razones del mayor coste del proyecto.

También explicó que se sopesó cubrir toda Preferencia inferior, pero que eso implicaba reforzar la cimentación y todos los pórticos, lo que aumentaría de forma notable el coste y el tiempo de ocupación del césped, por lo que se acordó con el Deportivo no abordar este proyecto.