Los paraguas no solo refugian de la lluvia. En un día muy caluroso, en el que los termómetros de A Coruña superaron los 26 grados, los fans de Melendi los usaron de sombrilla para evitar caer desfallecidos a las puertas del Coliseum, donde a las nueve y media de la noche estaba previsto que empezase el show. Desde primera hora de la mañana, algunos jóvenes decidieron dejar el plan de playa para otra ocasión y así ponerse a la cola de la entrada al recinto. Lo que no esperaban es que el sol pegase tan fuerte durante tantas horas. El paraguas fue, sin duda, la solución. Se vieron de todos los tamaños y colores. Lo que tampoco faltó fue la botella de agua.
