De los tres hombres que idearon un plan para conseguir dinero de forma "inmediata" solo uno fue condenado a cinco meses de cárcel, que no cumplirá, y a devolverle a la víctima los 590 euros que le sustrajo. El juez indica en la sentencia que los tres procesados eligieron como víctima a un hombre de 79 años que accedió a una sucursal bancaria del Barrio de las Flores. El sentenciado lo siguió al interior de la entidad y, tras ver que retiraba 590 euros y los guardaba en un dietario, salió e informó a los otros dos participantes en el golpe.
En cuanto el vecino de A Coruña abandonó el banco, uno de los ladrones lo abordó por la espalda y le roció un líquido rojo para, después, convencerlo de que había visto cómo caía la pintura desde un piso. "Valiéndose de buenas palabras y un trato amable, lo convenció para entrar en el inmueble y subir a reprochar lo ocurrido a los supuestos pintores causantes de la mancha", sostiene el juez en el fallo, en el que asegura que al llegar al tercer piso se encontraron con el tercer implicado en el hurto. "Los dos acusados empezaron a hablar simultáneamente y de manera amable y cortés para, aprovechando el estado de confusión y vulnerabilidad del perjudicado, dada su avanzada edad, ganarse su confianza y conseguir que dejase el dietario en el suelo", indica el magistrado. En ese momento, le dijeron que iban a buscar a los pintores y huyeron con el botín.
