Trabajar durante años para detalles que duran apenas unos minutos, o que ni siquiera percibimos. Esa es la realidad de Julio del Río, lead animator de la Moving Picture Company, y supervisor de efectos especiales de varias de las producciones más populares de los últimos tiempos. Piratas del Caribe: la venganza de Salazar, Guardianes de la Galaxia; Las crónicas de Narnia: el príncipe Caspian y las tres últimas entregas de la saga de Harry Potter son solo algunos de sus múltiples trabajos, cuya experiencia compartía ayer en el Coffee with del congreso Mundos Digitales.

- Empezó como animador tradicional, ¿cómo pasó a ser lead animator ?

-Dibujaba para series de televisión extranjeras y nacionales, y también para Filmax. Pero la animación tradicional murió en España, así que tuve que reciclarme al 3D. No puedo decir que fuera una transición fácil, pero como me parecía una tecnología atractiva, la cogí con ganas.

- Con ella ha hecho muchas producciones de renombre. ¿Cuál ha sido el mayor reto al que se ha enfrentado como animador?

-Depende. Las películas que son difíciles, lo son por una serie de factores: porque hay poco tiempo, porque técnicamente son especialmente difíciles, porque a lo mejor no tienes todavía el nivel para hacer lo que se te pide? Creo que mi primera película como supervisor de animación, 47 Ronin, fue difícil, porque era mi primera vez en ese puesto y suponía mucha responsabilidad. Las películas de Harry Potter también fueron complicadas. Había que trabajar mucho tiempo el mismo plano sin parar.

- También estuvo en El libro de la selva . ¿Cómo fue el trabajo previo del filme?

-Tuvimos que documentarnos mucho, estudiar cómo se movían los animales, y hacer pruebas, porque hay diferencias entre los tipos de criaturas a la hora de animar. Un herbívoro no se anima igual que un carnívoro, por ejemplo. Los tamaños también influyen, así como el peso o el tipo de columna vertebral que tienen. Siempre tienes que adaptarte a cada cosa que animas.

- ¿Y cómo saben que su trabajo ha finalizado, que la escena no necesita ningún retoque más?

-A ver, la perfección no existe [se ríe]. En muchos casos los planos siguen retocándose y mejorándose continuamente, y se acaban cuando se terminan el tiempo o el dinero. Pero lo bueno de la animación por ordenador es que siempre puedes añadir capas de calidad, coger un trabajo ya hecho, refinarlo y añadirle más detalles.

- Hablaba antes de Harry Potter . Estuvo en las tres últimas películas, el final de la saga. ¿Había mucha presión?

-Sí, Harry Potter fue bastante presión. Yo estaba de lead animator en las dos últimas y el nivel de exigencia era muy alto. Había que conseguir calidad, hacerlo bien, porque eran películas muy establecidas y la gente esperaba mucho de ellas. Lo bueno es que nos dieron mucho tiempo, así que se pudieron refinar las cosas al máximo.

- ¿Cuál fue la secuencia más difícil de crear?

-En Harry Potter hubo varias cosas que fueron realmente difíciles. La secuencia de quidditch que hicimos para la quinta película, por ejemplo, fue muy compleja. Era casi toda digital, y fue complicado hacer creer que de verdad estaban ahí. Tuvimos que trabajar mucho. También hubo otra secuencia muy difícil, que hice yo personalmente: Los momentos en los que los personajes desaparecían en las dos últimas películas. Se desplazaban de un lugar a otro muy rápido, y era complicado porque tenían que estirarse y perder volumen.

- ¿Y lo más divertido de animar?

- Nagini, la serpiente de Voldemort. La hice durante muchos meses, y era interesante de animar. También los guerreros de piedra?

- Las criaturas.

-Sí, creo que las criaturas son lo más divertido, más que las personas.

- ¿Cómo construyó a Nagini?

-Me basé en vídeos, sobre todo. Si quieres animar a una serpiente, tienes que saber por qué se mueve así, qué es lo que la hace moverse. Estudiamos vídeos, documentales de naturaleza, leímos artículos? Tuvimos que aprender.

- ¿Cuánto tiempo le llevó solo la serpiente?

-La serpiente entera nos costó casi un año de trabajo. Era para las dos partes de Harry Potter y las reliquias de la muerte.

- Y eso que tampoco sale tanto.

-Ya, ese es el problema con los efectos visuales. Trabajas a tope durante una secuencia y luego dura cinco minutos. Los efectos invisibles también son así, poner una cosa y que no se note que es un efecto especial. Pasa mucho en el cine. Solemos sustituir elementos, poner otros fondos o reemplazar un cielo nublado por uno azul.

- Otro de los filmes en los que trabajó fue en la última entrega de Piratas del Caribe , ¿cómo fue el proceso?

-Hicimos muchas cosas. Sobre todo océanos, barcos... Y dobles digitales. Los dobles los hacíamos para las escenas que eran demasiado arriesgadas incluso para un especialista. Por ejemplo, cuando alguien salta de un barco a otro en medio de una tormenta. Eso es todo digital.

- ¿Cuántos eran dobles?

-Pues... había un gran porcentaje de dobles digitales. Hicimos muchos planos de ese estilo para Piratas del Caribe.

- Me dijeron que actualmente sigue trabajando con Disney, preparando un remake de El rey león.

-Puede ser [se ríe], no voy a confirmar ni a desmentir nada.

- ¿Es un secreto?

-¿Sabes qué pasa? Como es natural, los clientes como Disney intentan proteger sus contenidos, y si trabajamos con ellos tenemos que ser cautos. Es por eso por lo que no puedo hablar mucho de algunas cosas. Hay que pedir permiso, porque al final es su propiedad.