La experiencia adquirida en la construcción del puerto exterior de punta Langosteira y las características con que cuentan sus instalaciones llevaron a la empresa Dragados a elegir este emplazamiento para llevar a cabo a partir de septiembre la fabricación de cajones de hormigón que se emplearán en la dársena exterior de la ciudad escocesa de Aberdeen.

La Autoridad Portuaria señala que la constructora, que ya tiene amarrada en el muelle el barco cajonero, se decantó por esta ubicación a causa de los calados, la situación geográfica y los medios técnicos disponibles. El puerto exterior de Aberdeen, la tercera ciudad de Escocia, supondrá una inversión de 400 millones de euros y sus obras comenzarán este año con el objetivo de que terminen en 2020, aunque los trabajos en Langosteira en principio terminarán el año que viene.

La dársena contará con dos diques de abrigo y muelles de 1.400 metros de longitud, para cuya construcción se utilizarán piezas de hormigón de gran tamaño, como las que fueron empleadas en el puerto exterior coruñés. Dragados fabricará 22 cajones de hormigón 52 metros de largo, 15 de ancho y 16 de alto para los que precisará 90.000 toneladas de áridos y cemento y ocupará 5.000 metros cuadrados en las proximidades del muelle principal y una zona de agua de 14.000 metros cuadrados.

En este lugar se llevará a cabo el proceso completo de fabricación de los cajones -encofrado, armado y hormigonado- y la posterior botadura de estas estructuras, que flotarán y serán reforzadas con acero para hacer frente al oleaje, el terreno donde se instalarán y las actividades portuarias.

Transporte a flote

Dragados empleará a 120 personas en este proyecto, a cuya conclusión los cajones serán transportados hasta Aberdeen, a 2.000 kilómetros de distancia, mediante plataformas flotantes especiales para estas operaciones. Además de las instalaciones de Langosteira, la Autoridad Portuaria proporcionará a la empresa apoyo técnico y logístico. El Puerto considera que la elección de la dársena exterior para acometer este proyecto supone "un nuevo aval de su solvencia técnica", así como de su "versatilidad para albergar todo tipo de actividades".