Una vivienda de la calle San Fernando, en el barrio de Monte Alto, sufrió dos asaltos en los últimos tres días, aunque la persona que accedió al piso no se llevó ningún objeto de valor. A raíz del segundo asalto, ayer al mediodía, los propietarios llamaron a la Policía Nacional tras sonar la alarma y con la creencia de que el individuo se encontraba en su interior. Ocho agentes se presentaron en el lugar, donde las puertas estaban cerradas y nadie las abrió desde dentro; un vecino, ante el nerviosismo que suscitó el suseso, golpeó las cerraduras y tiró la puerta abajo para acceder a la vivienda, que estaba vacía.

El asaltante, registrado en las imágenes grabadas por las cámaras de la empresa que instaló la alarma, accedió al piso, situado en la planta baja, por un patio interior a través de una red que cortó. Este procedimiento fue el que utilizó tanto ayer como el domingo por la mañana en el primer asalto, cuando los dueños, que creen que el hombre trataba de okupar la casa, llamaron al 091 y reforzaron el sistema de seguridad con sensores en las ventanas para alertar de la presencia de intrusos.