"Todos mis libros anteriores fueron un aprendizaje para llegar a Lamia", explicó ayer en Viñetas desde o Atlántico el autor Rayco Pulido en referencia a una obra que le consagró el año pasado en el mundo del cómic. Aunque pretendió elaborar un "tebeo académico", se dejó llevar por su afición a la novela negra e introdujo en la narración sorpresas para el lector. También se propuso que la acción fuera protagonizada por una mujer para que la obra calase entre el público femenino, según detalló. Pulido deja por el momento las historias largas para autoeditar otras más cortas al considerar que con Lamia ha cerrado un ciclo.

Pablo Auladell, ganador del Premio Nacional de Cómic 2016 también compareció ayer en el salón coruñés para hablar de la obra que le valió el galardón, El paraíso perdido, basado en el poema del clásico inglés John Milton. El libro fue concebido como una novela gráfica encargada por una editora de poesía que al final fue realizado por Sexto Piso. Auladell llegó a pensar que perdería los cuatro años de trabajo invertidos y ahora muestra su "estupor" por el éxito logrado.