El aeropuerto de Alvedro perdió en tan solo tres días -el pasado jueves, este lunes y este martes- un total de 1.416 pasajeros por el desvío de seis vuelos. Y es que el aeródromo carece de ayudas a la navegación que le permitan combatir de manera eficiente la mala meteorología. En la actualidad, según ha denunciado el comité de empresa, el protocolo que deben seguir los pilotos en condiciones de baja visibilidad les obliga a decidir si pueden o no aterrizar a 2.000 metros de visibilidad horizontal y un techo de nubes igual o superior a 250 pies, cuando hasta marzo de 2013, los límites estaban fijados en 600 metros de visibilidad horizontal y 165 pies.

La plataforma Vuela Más Alto denuncia también el desplazamiento del umbral de la pista 21 -que tiene instalado ILS-, la más cercana de la ría (150 metros), así como la falta de mantenimiento en las zonas de servidumbre del aeropuerto, ya que los eucaliptos que hay en esta zona boscosa dificultan la visibilidad de los pilotos a la hora de tomar tierra.

El jueves 24 de agosto, se vieron afectados por la mala meteorología dos vuelos, uno procedente de Madrid y otro de Barcelona, ambos aterrizaron en Lavacolla y engrosaron las estadísticas del aeropuerto compostelano con 836 pasajeros. El pasado lunes 28, los afectados fueron 250 viajeros que venían de Madrid y, al día siguiente, hasta 330 usuarios que pretendían aterrizar o despegar desde Alvedro tuvieron que cambiar de planes. En este caso, a diferencia de otros desvíos registrados en Alvedro, todas las operaciones se abortaron en la cabecera 21, la principal de Alvedro y la que cuenta con sistema antiniebla ILS. En un mes en el que los viajeros que suma el aeropuerto superan los 3.300 diarios, la pérdida de 1.500 pasajeros en tan solo tres días supone más del 1% del tráfico de todo el mes.

En el Documento de Regulación Aeroportuaria 2017-2021, el Ministerio de Fomento especifica que en los aeropuertos en los que el número de operaciones afectadas por visibilidad reducida sea "anualmente superior a 25 operaciones comerciales y/o diez cancelaciones" -como es el caso de Alvedro, que en 2015 contó con 160 desvíos-, el gestor tendrá que instalar ,"en la medida de lo posible", sistemas de ayudas visuales y/o no visuales, o "mejorará los sistemas existentes, que permitan evitar dichas afecciones o, en su defecto" tendrá que presentar a Fomento una "justificación de los motivos por los que no se considera viable dicha instalación o mejora".

El gestor aeroportuario Enaire decidió en marzo de 2016 que los desvíos se podrían reducir en el aeródromo coruñés utilizando un sistema que ayudase a los pilotos a automatizar la maniobra de aterrizaje añadiendo unas coordenadas a su plan de vuelo y facilitando, de ese modo, que tomasen tierra en la cabecera 03, ya que, actualmente, carece de ayudas a la navegación.

A partir de entonces, el gestor de navegación aérea de España adscrito al Ministerio de Fomento, Enaire, anunció que necesitaba realizar unos vuelos de prueba para definir esas coordenadas. Más de un año después todavía no se han ejecutado y, a preguntas de este diario, Enaire no desveló ayer si hay fecha para desarrollar estas comprobaciones ni aclaró si el proyecto todavía sigue en marcha o se ha aparcado.

A pesar de estas limitaciones, Alvedro suma pasajeros y la plataforma Vuela Más Alto estima que cerrará el año con una cifra récord de 1,12 millones de pasajeros.