"Negociaciones encauzadas", "clima de entendimiento", "ahora prima el sentido común". Son frases o expresiones con las que en el arranque del nuevo curso político a escala municipal el Gobierno de Marea y el grupo socialista ratifican la relación de sintonía de la que dan muestras desde junio pasado, tras la aprobación del presupuesto de este año. Pese a que 2017 comenzó con fuertes enfrentamientos entre unos y otros y el PSOE propició una cuestión de confianza vinculada a las cuentas que finalmente no derivó en moción de censura, la armonía de hace tres meses se repite ahora, a tenor de las palabras del alcalde, Xulio Ferreiro, y del portavoz socialista, José Manuel García, tras las primeras reuniones en comisión entre el Ejecutivo y los demás grupos de la Corporación. Ocurren además antes de las negociaciones que las fuerzas políticas mantendrán en breve por las ordenanzas fiscales y el presupuesto de 2018.

Antes de que las nuevas cuentas se pongan sobre la mesa, los dos grupos ya han acercado posturas respecto a cambios que afectan al presupuesto en vigor. En junio los socialistas alcanzaron un acuerdo con el Gobierno local para incorporar al documento contable 3,5 millones de euros procedentes de los beneficios de Emalcsa a través de una modificación presupuestaria. Con este cambio el PSOE puede decidir el destino de un tercio de esa transferencia, que asignará principalmente a proyectos de carácter social y vinculados al deporte. El pleno del próximo lunes aprobará de forma definitiva este modificación presupuestaria, después de que el Ejecutivo rechazase las alegaciones presentadas por el grupo popular, que reclamaba que 893.000 euros fueran destinados a convenios nominativos con entidades vecinales, culturales y sociales.

Hay otro cambio en las cuentas impulsado por el Gobierno local sobre el que pactan Marea y PSOE para sacar adelante en un próximo pleno por el que destinar a la firma de convenios con distintas entidades sociales y deportivas el ahorro obtenido por el Concello gracias a la salida del Plan de Ajuste al que se acogió el Ejecutivo anterior en 2012 y al pago de intereses de los préstamos asociados. "En este objetivo hay coincidencia con el PSOE, con el que creemos que podemos llegar a un acuerdo. Estamos cerrando los últimos flecos, pero el tema está bastante encauzado", avanzó ayer el alcalde. García confirma que falta que el Gobierno de Marea "dé el sí a algunas" de las aportaciones sugeridas por los socialistas.

"Hay un clima de entendimiento con el Gobierno local, como había antes del verano. No quiero personalizar, pero ahora se actúa con sentido común porque se necesitan votos en el pleno", se extiende el portavoz del PSOE, que ya en junio, al mes de aprobarse el presupuesto de 2017, pidió a Ferreiro que no demorase los contactos por el de 2018.

Las cuentas del próximo año están en el horizonte del Ejecutivo de Ferreiro, que reclamó a sus concejales que tuvieran lista a mediados de agosto la documentación económica de sus áreas. El alcalde comentó que el proceso de negociación de los presupuestos municipales del año que viene "ya se inició de forma incipiente antes del verano" y se formalizará a partir de este mes, tras mantener conversaciones con el grupo socialista.

"Los cambios en el actual presupuesto que estamos tratando ahora no son temas menores, ya que marcarán la pauta de las negociaciones por las próximas cuentas para que se aprueben en tiempo y forma", matizó el socialista José Manuel García.