La ampliación de la pista de Alvedro culminaba, en junio de 2015, la lista de grandes inversiones que diseñó AENA dentro del plan director del aeropuerto coruñés, que se aprobó en 2001, el mismo año que estrenaba su terminal de carga. El demandado alargamiento de la pista llegaba con varios años de retraso como una de esas inversiones de Fomento que, entre los recortes, la voluntad política intermitente y la complejidad de la tramitación burocrática, acaban acumulando retrasos. Desde entonces, las instalaciones han ido sumando mejoras puntuales como la sala VIP pero lejos de las que preveía el fallido plan de 2011, que sigue encallado en su trámite ambiental. Alvedro prevé cerrar el año con 1,15 millones de usuarios, una cifra ya cercana al récord de 2007 y que enfila las previsiones de crecimiento del primer borrador del nuevo documento marco, incremento sobre el que diseñaban la futura estrategia inversora.

Entre la recesión económica y la quiebra de Spanair, Alvedro se quedó atrás de aquellos horizontes de crecimiento de tráfico que se pensaron en 2011, previsiones a las que ahora sí se comienza a acercar. De cumplirse las estimaciones, en 2017 alcanzaría su tercera mejor marca. En el horizonte de crecimiento más modesto, calculado con los datos socieconómicos y de mercado en aquel momento, el plan director estimaba que pasarían por Alvedro anualmente 1,31 millones de pasajeros comerciales. En el horizonte más optimista, serían 1,87 millones, descartando además que la Alta Velocidad, que aún no se ha completado, restase pasajeros en el enlace con la terminal de Barajas-Adolfo Suárez.

En noviembre de 2011, las administraciones afectadas recibían el borrador de la actualización de este documento, actualización que la normativa recomienda renovar cada ocho años. Lleva en trámites desde entonces. En aquel primer texto, que se remitió por ejemplo a concellos del área como Culleredo y Oleiros, AENA consideraba que no sería necesario ampliar más la pista a lo largo, pero sí a lo ancho. Hasta 150 metros desde cada lado del eje de pista, anchura que ahora mismo solo tiene la parte ampliada del campo de vuelos. La otra actuación más relevante que AENA veía necesaria sería la plataforma de aviación general (estacionamiento de aviones y demás actividad exterior próxima a la pista), con 14 puestos (ahora hay 8) y varios hangares. Además, habría que ampliar la terminal de pasajeros en 14.000 metros cuadrados. Las actuaciones requerirían la expropiación de 12.000 metros cuadrados.

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Una tarde de desvíos

La tarde de intensa niebla en la ciudad, con la capa de nubes sobre la terminal muy baja, causó otra tarde negra en el aeropuerto de Alvedro en lo que a desvíos se refiere. Fueron seis los aviones que no pudieron llegar a destino. El primero fue el enlace de Iberia procedente de Barajas de primera hora de la tarde, que acabó en Santiago. Desde entonces, no aterrizó ni uno más. Sufrieron la misma suerte otros dos enlaces de Iberia con Madrid, otros dos de Air Europa y uno de Vueling procedente de Barcelona.