El plan de dinamización de la Ciudad Vieja elaborado por el Gobierno local incluye la previsión de que la peatonalización total del barrio se ponga en marcha durante la primera mitad del próximo año, momento en el que los residentes contarán ya con alternativas para estacionar sus vehículos en el entorno tanto en superficie como en los estacionamientos subterráneos existentes. Así se lo comunicó ayer el concejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, al presidente de la asociación de vecinos, Pedro Roque, a quien expuso los proyectos que su departamento llevará a cabo en la zona en los próximos meses y que declaró tras la reunión: "Peatonalizar ha sido positivo en todas las ciudades y aquí no tiene por qué ser de otra manera".

El Gobierno local pretende terminar antes de fin de año los documentos técnicos sobre la reordenación del tráfico, las propuestas para el aparcamiento y los proyectos de reforma de calles para presentarlos a principios del próximo. El objetivo es ejecutar la peatonalización durante el primer semestre de 2018, pero Varela advierte de que antes de que se prohíba el aparcamiento de los residentes en el barrio habrá "alternativas tanto en superficie como en los tres estacionamientos subterráneos de la zona", que, según el concejal, "están mostrando buena disposición para llegar a acuerdos específicos para los residentes", que estacionan en el barrio a diario unos 220 coches.

El Concello descarta por el momento aplicar medidas para impedir el paso de vehículos no autorizados en la Ciudad Vieja, donde en la actualidad solo pueden circular los residentes y los transportistas, ya que confía en "pedagogía y la señalización", aunque Varela advierte que si se aprecia un aumento en las infracciones, adoptará otras iniciativas y recuerda que el tráfico en la Ciudad Vieja se redujo de forma notable tras la apertura del túnel de O Parrote.

El proyecto municipal incluye también un estudio para la dinamización comercial de la Ciudad Vieja de la que para Varela la peatonalización "será una herramienta más", junto con la organización de ferias y acontecimientos "para conseguir más vitalidad del barrio".

"Creo que quieren hacer las cosas bien y contando con todos, aunque llevará tiempo aplicarlo, sobre todo la revitalización y dinamización de la Ciudad Vieja", manifestó Pedro Roque sobre las propuestas municipales, de las que dijo que llegan en un "buen momento" para que los vecinos digan "lo que tiene que ser el barrio en el futuro".

Roque recordó que la peatonalización completa de la Ciudad Vieja se reclama desde hace veinte años y que el plan urbanístico para el barrio menciona que la solución al problema debe ser el aparcamiento de O Parrote. El portavoz vecinal explicó que hace meses contactó con los estacionamientos del entorno y comprobó que ofrecen un número de plazas suficiente y con precios asequibles para los residentes.

Para Roque, "cuando se quiten los coches se van a descubrir muchos espacios nuevos" en la Ciudad Vieja, en la que cree que se dispondrá de un espacio urbano diferente, por lo que considera que "lo más importante ahora es sacar los vehículos".

El plan municipal prevé la reforma del pavimento de la calle Cortaduría, donde se está a la espera de la autorización de la Dirección Xeral de Patrimonio, así como el de la calle Damas, cuyo proyecto acaba de empezar a redactarse , y de la de Nuestra Señora del Rosario, donde los arqueólogos tendrán que pasar a finales de este mes un georradar para ver si en el subsuelo hay restos históricos. En la parte posterior de la Fundación Luís Seoane se acondicionará la parcela del antiguo edificio militar para crear un espacio ajardinado que tendrá la muralla de la ciudad como barandilla, mientras que en el resto del barrio se retirarán bolardos, se rebajarán de aceras y se suprimirán barreras arquitectónicas.